Agilidad y simplificación de trámites en la evaluación ambiental de las empresas

Castilla y León participará en un grupo de trabajo, bajo la denominación «Magrama», cuyo objetivo es agilizar y simplificar los trámites de evaluación ambiental, así como la colaboración en los planes hidrológicos y el cumplimiento de la depuración de aguas en las aglomeraciones de más de 2.000 habitantes, tal y como había demandado en los últimos meses.

Un grupo de trabajo del que formarán parte varias comunidades autónomas y que comenzará a trabajar de manera inmediata. El anuncio se ha hecho durante la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente, celebrada en la capital de España y que contó con la presencia del consejero castellano y leonés, Antonio Silván. De esta manera, se favorecerá la implantación y desarrollo de actividades inversoras con las mayores garantías jurídicas y con criterios homogéneos en toda España.

Durante la Conferencia Sectorial se ha abordado también, la voluntad y compromiso inequívocos de cumplir las exigencias de la UE en materia de depuración de aguas residuales mediante la ejecución del Plan Nacional de Calidad de las Aguas, dando prioridad a la ejecución de las infraestructuas de depuración en aglomeraciones de más de 2.000 habitantes equivalentes, al agregar la población y la actividad ganadera e industrial.

Por otra parte, Castilla y León ha suscrito un protocolo de colaboración con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y otras doce comunidades autónomas para reforzar e impulsar las acciones para la conservación del quebrantahuesos.

Para el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, este acuerdo supone «un compromiso colectivo» para la conservación de especies en vías de extinción que demuestra «la sensibilidad y responsabilidad con la conservación de esta especie avícola que se va a garantizar en el entorno del Parque Nacional de Picos de Europa».

Con unas 130 parejas reproductoras, España es el país europeo con mayor población de quebrantahuesos, las cuales habitan en el Macizo Pirenaico, en Aragón, Cataluña y Navarra.

En esta línea se enmarca el proyecto de reintroducción de la especie en los Picos de Europa, donde se extinguió a mediados del siglo XX.