Hospitales

Alertan a no bajar la guardia y donar sangre ante las necesidades del verano

La figura callada y desinteresada del donante protagoniza el Día Mundial que se celebra mañana

Jesús Murías, presidente de la Federación de Hermandades de Donantes de Sangre de Castilla y León
Jesús Murías, presidente de la Federación de Hermandades de Donantes de Sangre de Castilla y Leónlarazon

La figura callada y desinteresada del donante protagoniza el Día Mundial que se celebra mañana.

Castilla y León es una tierra solidaria cuyos habitantes siempre acuden a echar una mano de forma desinteresada a quien lo necesite y donde haga falta, ya sea en España o en cualquier país del mundo. Y cuando hablamos de sangre, tampoco es una excepción.

Con las más de 105.000 donaciones registradas el pasado año y el aumento que se espera para este año, según avanza a LA RAZÓN Jesús Murías, presidente de la Federación de Hermandades de Donantes de Sangre de Castilla y León, así como con más de un 40 por ciento de donaciones por cada mil habitantes y los más de 300.000 donantes activos, esta Comunidad puede presumir de liderar este apartado en España. En estos momentos, los centros hospitalarios de Castilla y León, que precisan de 400 bolsas de sangre como mínimo al día, tienen cubiertas sus necesidades.

Pero cuando hablamos de sangre, nunca es suficiente. «Todos los días hace falta para las intervenciones quirúrgicas, para los tratamientos de quimioterapia contra el cáncer, para los trasplantes o para otros cientos de tratamientos diarios que requieren de los derivados de la sangre», señala Murías, quien anima a la sociedad, y especialmente a los jóvenes, a donar plasma y a no bajar la guardia con vistas a un verano cada vez más cercano. «Es la época del año -recuerda- que más sangre hace falta debido a las vacaciones y a que por ello la gente se mueve más y hay más accidentes».

Mañana se celebra el Día Mundial del Donante de Sangre y Murías quiere que se reconozca la labor callada y desinteresada» del donante, «que no busca nada a cambio sino la satisfacción de saber qué ayuda a los demás», y para advertir a la Organización Mundial Española de Trasplantes que destaque no sólo la generosidad de los donantes de órganos sino también la de los de sangre «porque si no hay bolsas de sangre no se podría trasplantar, y es algo que se les olvida», apunta.

El perfil mayoritario de donantes en esta Comunidad está entre los que tienen 30 y 45 años y los que cuentan entre 45 y 65. Los jóvenes es una asignatura pendiente en la actualidad. Murías reconoce que el envejecimiento de la población y la emigración de la juventud a ganarse la vida fuera es un problema a la hora de captar donantes jóvenes. Pero asegura que en las hermandades trabajan en ello a través de las redes sociales, actualizando mensajes cada día así como en la creación de un logotipo, que podría estar listo este verano, que unifique a todas las hermandades y sea algo más reconocible en la sociedad.

«Donar sangre es donar vida»

Para atraer a los jóvenes tiene claro también que hace falta una mejor planificación de la mano del Centro de Hemoterapia y Hemodonación a la hora de visitar las universidades los días adecuados, «como pueden ser los martes y miércoles», apunta Murías. E insiste en que los jóvenes deben saber que donar, «no es una pérdida de intereses, sino que se gana». Y pese a lo que dicen las estadísticas, «no deben tener miedo al pinchazo, ya que no pasa nada y donar sangre, es donar vida».

Jesús Murías avanza que el sábado se reunirán en la localidad zamorana de Toro alrededor de 200 delegados de las hermandades que hay en ciudades y pueblos de la Comunidad para intercambiar opiniones e iniciativas de cara al futuro.