Ciudadanos dice que «a día de hoy» no apoyará el techo de gasto de la Junta

La aprobación del techo de gasto para el próximo año -paso previo al debate presupuestario-, será el principal punto que se debatirá en el próximo Pleno de las Cortes. Fijado en 9.575 millones de euros por el Gobierno popular de Juan Vicente Herrera, en estos momentos no cuenta con los apoyos parlamentarios suficientes para que pueda salir adelante.

Ciudadanos, que con su abstención hace apenas tres meses permitió dar luz verde a las cuentes de este año, se mantiene firme en su postura de no apoyar al PP esta vez siempre y cuando no avance en materia de regeneración política. Concretamente, a que se aborden las reformas de las leyes Electoral y de elección de senadores; que se elimine el aforamiento de los procuradores; o que no se bloqueen acuerdos unánimes de la oposición en las comisiones de investigación.

«A día de hoy votaremos en contra», decía su portavoz parlamentario, Luis Fuentes, quien, pese a todo, tendía la mano para seguir dialogando hasta el martes para poder llegar a un acuerdo que permita sacar adelante este techo de gasto.

Los socialistas, por su parte, al igual que Podemos e IU-Equo confirmaban ayer que su voto será negativo. «Este techo de gasto es una maniobra publicitaria inventada y falseada hecha por trileros de la consejería de Hacienda», decía el socialista Luis Tudanca, mientras que el podemita Pablo Fernández iba más allá al asegurar que este trámite es una «tomadura de pelo» a los castellanos y leoneses, puesto que cree que al final, Ciudadanos «apoyará al Partido Popular».

Desde el PP, Raúl de la Hoz lamentaba no haber encontrado el respaldo todavía a este techo de gasto que, en su opinión, crece más de un tres y medio por ciento y está llamado a consolidar la recuperación económica, pero no cierra las vías de diálogo a ningún partido para tratar de acercar posturas.

Unidad de España

Por otro lado, cabe señalar que el presidente del PP, Alfonso Fernández Mañueco, defenderá en la próxima sesión plenaria una iniciativa parlamentaria de su grupo, apoyada por PSOE, UPL y Ciudadanos, en defensa de la unidad de España y de la Constitución ante el desafío soberanista de Cataluña. Podemos e Izquierda Unida se desmarcan de esta iniciativa que consideran que no soluciona nada y con la que los firmantes solo pretenden ganar votos.