Fotografía

El granadino Gómez Acosta, premiado con el Francisco Pino de Poesía Experimental

En esta cuarta edición se han recibido un total de 240 trabajos procedentes de doce países

El jurado formado por Antonio Piedra, Carlos Aganzo, Francisco Pino, Manuel Olveira y José Noriega informan del fallo del IV Premio Francisco Pino de Poesia Experimental
El jurado formado por Antonio Piedra, Carlos Aganzo, Francisco Pino, Manuel Olveira y José Noriega informan del fallo del IV Premio Francisco Pino de Poesia Experimentallarazon

En esta cuarta edición se han recibido un total de 240 trabajos procedentes de doce países

«Reescritura», del granadino José Miguel Gómez Acosta, se ha alzado con el IV Premio de Poesía Experimental Francisco Pino, en una edición en el que se han recibido 240 trabajos de doce países. Un galardón por el que optó el jurado de manera unánime, al igual que los dos accésit que recayeron en «Sextina en clave pirenaica» de los ilustradores Cecilia Moreno y Kikke Ibáñez e «Índice» del tándem asturiano formado por Hermes González y Carmen Santamarina.

El jurado estuvo formado por Francisco Pino, patrocinador del premio e hijo del poeta; el editor y crítico José Noriega; el director de la Fundación Jorge Guillén, Antonio Piedra; el director de El Norte de Castilla, Carlos Aganzo; y el director del Musac, Manuel Olveira, que ejerció de presidente. El propio Olveira detallaba la obra ganadora, en la que se recopila una serie de anotaciones en el tiempo, haciendo alusiones continuas, como si de una obsesión se tratara a enseresdomésticos». «Muy estimulante», resaltó. El primero de los accésit, demuestra una gran economía de medios, con «cierta pureza» y en el que se refleja la elegancia formal del alfabeto y símbolos , mientras que el segundo es un poema muy interesante en el que habla de la «nostalgia» y la «memoria». A pesar de los 240 trabajos recibidos, sólo 61 fueron seleccionables, bien por no cumplir gran parte de ellos las bases del concurso y el resto, medio centenar, por la falta de calidad literaria.

En este sentido,el crítico José Noriega, animó a los futuros concursantes a arriesgar más, ya que se han visto en esta edición trabajos «muy desgastados» y «aburridos». «Hay que buscar nuevas realidades artísticas unidas cl concepto», declaró.

Por otra parte, el director de la Fundación, Antonio Piedra, pidió una solución al Ayuntamiento de Valladolid para contar con el Primer Centro de Poesía Experimental en un edificio colindante abandonado a la Jorge Guillén. Sería una cesión, a coste cero, ya que la familia de Pino correría con los gastos de la restauración.