El tramo que resta de la A-66 entre Zamora y Benavente se retomará en unos días

El famoso tramo de la Ruta de la Plata (A-66) de 49 kilómetros entre Benavente y Zamora empezará a construirse en unos días. Una infraestructura demandada y deseada por los ciudadanos y conductores, que parece que ya por fin se va a acometer tras muchos años de espera.

En cuanto la empresa concesionaria resuelva unos flecos administrativos pendientes, las máquinas empezarán a trabajar en esta obra de infraestructura que discurrirá en paralelo a la actual carretera nacional N-630 para minimizar las afecciones medioambientales. El grupo ya tiene redactado el informe sobre el proyecto constructivo, por lo que en breve comenzarán los trabajos ya que las empresas adjudicatarias son las más interesadas en agilizar al máximo el procedimiento puesto que se ha establecido el procedimiento de pago por disponibilidad. El Ministerio de Fomento y su titular, Ana Pastor, es consciente de que el dinero escasea para grandes obras, pero ha apostado por los grandes corredores viarios de España. Y la Ruta de la Plata es uno de ellos. Sus 809 kilómetros de trayecto y los doce mil vehículos que cada día de media suelen circular por ella así lo avalan. Por este motivo, se va a acometer en breve el tramo que resta para que Gijón y Sevilla estén conectadas por autovía.

Los 49 kilómetros del tramo adjudicado por el Ministerio de Fomento se han dividido en tres tramos. El primero, de 14,3 kilómetros, discurre entre la A-6 (Autovía del Noroeste) y las localidades de Castrogonzalo-Santovenia; el segundo, de 17,8 kilómetros, une los municipios de Santovenia-Fontanillas de Castro, y el tercero, de 16,9 kilómetros, de Fontanillas de Castro a Zamora.

El Gobierno de España se ha comprometido a finalizar esta obra en dos años. Así, confía en que a mediados de 2015 esté terminada la A-66, una autovía que no suma nuevos kilómetros en la Comunidad desde el 1 de junio de 2010, cuando se abrieron al tráfico 8,3 kilómetros entre Béjar y la provincia de Cáceres. Además, este tramo de autovía será el primero que Fomento ejecuta en la Comunidad mediante la fórmula de la colaboración público-privada, una opción que ya ha utilizado la Junta de Castilla y León para la Autovía de Pinares (A-610), que une Segovia y Valladolid.