Igea alerta sobre la infrafinanciación autonómica y reclama reformas urgentes

«La infrafinanciación autonómica genera un círculo vicioso de pérdida de oportunidades». Son palabras del vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, quien aseguró que las políticas de «futuro e inversión» están bloqueadas «por el tremendo esfuerzo que ha de hacerse para prestar los necesarios servicios a una población envejecida y dispersa», por lo que «si no se revierte esta tendencia, muy pronto esta Comunidad será insostenible».

Así de contundente se mostró durante la inauguración del Congreso Internacional sobre «Despoblamiento en España: Políticas de Repoblación» que se celebró en la Facultad de Derecho de la Universidad de Burgos, donde alertó de la fuga de jóvenes y de mano de obra, por lo que reclamó reformas urgentes y una «Educación y unas instituciones limpias».

«Esta semana, con más claridad aún, se ha visto la importancia de abordar un asunto como la despoblación», admitió Igea, quien aseguró que «ante quienes plantean el conservadurismo solo puedo decir que seguir igual no es posible». «Quienes lo hacen, lo que plantean es que Castilla y León pierda diez mil habitantes al año», indicó al tiempo que recordó que, en los últimos diez ejercicios, la Región redujo su población en 130.000 personas.

En este sentido, el vicepresidente subrayó que la despoblación es «sin duda, la enfermedad más grave que azota a Castilla y León». «Durante 30 años nos hemos sentido y hablado pero nada se ha hecho desde la Administración que haya sido eficaz para corregir esta deriva», apuntó Francisco Igea.

Al respecto, expuso que uno de los grandes retos a los que se enfrenta la Región es conseguir «tener municipios eficientes en el inmenso mundo rural».

«Nadie se quedará a vivir en nuestros pueblos si no hay futuro, si no hay trabajo», resaltó el consejero al tiempo que reconoció que «la ordenación del territorio es esencial para conseguir una prestación de servicios eficientes y de calidad».

Finalmente, consideró que la «Universidad debe dar lo mejor de sí misma para conseguir atraer población joven y talento que pueda transformar nuestro crecimiento».