Sociedad

La Diputación de Ávila se vuelca con la muestra de Las Edades en Arévalo

Agustín González anuncia una inversión de más de 52.000 euros

La Razón
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Cincuenta y dos mil euros. Esta es la cantidad que la Diputación de Ávila destinará al Ayuntamiento de Arévalo para que éste lo distribuya a su manera y de tal forma que pueda organizar con éxito y dar lustre a la próxima edición de Las Edades del Hombre, la número dieciocho, de la exposición de arte sacro más importante del mundo, que llevará por título «Credo». La cuenta atrás ya ha comenzado en esta localidad abulense, de casi nueve mil habitantes, y en apenas un par de meses dará comienzo una de las actividades que más turistas atrae a Castilla y León cada año.

Será el próximo 21 de mayo la fecha de la apertura de la muestra, que será inaugurada por la infanta Elena, y que tendrá como sedes las iglesias mudéjares de San Martín, El Salvador y Santa María, así como la Casa de los Sexmos, que hará además las veces de centro de recepción de los visitantes. Escenarios que permitirán resolver el problema que planteaba el pequeño tamaño de estos centros ya que entre los tres suman el espacio disponible en «Monacatus». No obstante, se ha aprovechado la circunstancia para crear una elipse que abraza el centro de la capital de la comarca de la Moraña.Y un recorrido que se llevará a cabo con un itinerario urbano señalizado que permitirá a los visitantes conocer los rincones culturales y turísticos principales de la capital morañega. Para guiar el recorrido entre los templos se distribuirán por las calles de Arévalo 19 paneles que recordarán la historia de las exposiciones celebradas en los 25 años que se cumplen.Todo está prácticamente dispuesto, aunque aún falta por completar un listado de piezas – quedan dos por confirmar-. Si bien, ambas tienen su alternativa: ya sea realizar restauraciones para que su calidad sea magnífica; construir la arquitectura efímera, todavía sobre plano, para enmarcar cada una de las obras; o ultimar el material que recogerá el catálogo.

El listado cuesta cerrarlo. Algunas se han tenido que rechazar por sus elevadas dimensiones dada la imposibilidad de meterlas en ninguno de los templos. Otras están pendientes de su confirmación como en el caso de una pieza del Vaticano con el que se está en conversaciones que se han visto ralentizadas por el vaivén de las últimas semanas motivado por el cambio de Papa.