La subida de impuestos lastra los negocios de los autónomos

Una más que excesiva presión fiscal. Es lo que está lastrando los negocios de miles de autónomos castellano y leoneses en los últimos años. Así lo denunciaba el presidente de la Federación de Autónomos de Castilla y León, Feacyl, Javier Cepedano, quien cifraba en una treintena la subida de impuestos en los últimos 16 meses en España, algo «insoportable» para el colectivo.

Cepedano echó en cara al Gobierno que para perseguir el equilibrio se dedique a incrementar los tributos «en vez de bajar los gastos públicos» y que su aumento descoordinado está distorsionando el mercado.

Además, reclamó una consolidación fiscal y que las medidas que se adopten en este campo tengan vigor a medio plazo y a largo plazo, y que no sean «temporales», como en la actualidad viene sucediendo. Una bajada en los tipos impositivos, aseguró, «agilizará el consumo», a la vez que lamentó que las soluciones para capear la crisis están llegando muy lentamente y eso hará «que muchos empresarios se queden por el camino»

Más apoyos

También, el presidente de Feacyl, reclamó mayor apoyo a los emprendedores y sobre todo a la hora de crear empresas, donde criticó los enormes costes burocráticos existentes. Otro de los problemas actuales que denunció Javier Cepedano es el impago por parte de las administraciones a los autónomos, una deuda que asciende en toda España a 30.000 millones de euros. En este sentido, Cepedano informó que nuevamente se están produciendo llamadas por parte de algunas organizaciones territoriales que sufren retrasos en los cobros por prestación de servicios, a pesar de las medidas aplicadas por el Gobierno para el pago en un periodo nunca superior a los 60 días.

El presidente de Feacyl señaló que los principales problemas se viven en la administración regional, ya que las diputaciones son buenas pagadoras, y que ya se han realizado algunas reuniones con responsables de la Junta para tratar de atajar el problema. Por eso, desde Feacyl se propone el establecimiento de un plazo de pago de 30 días con una ampliación de 60 días, para aquellas operaciones privadas que se puedan realizar con la Administración. El acceso al crédito es otra de las preocupaciones del colectivo autónomo así como la sostenibilidad de la Seguridad Social, para lo que reclamó un marco laboral y flexible para adaptarse a las necesidades del mercado y de esta manera frenar también la distorsión que se está viviendo en la economía.