Los asiáticos, decididos a hacer de Seda Solubles la plataforma europea del café

Buenas noticias para Castilla y León, en general, y para los palentinos, en particular. Y es que la multinacional asiática Olam apuesta decididamente por el futuro de Seda Solubles.

Hace un año más o menos de que los principales bancos de acreedores de Seda Solubles presentaban un concurso para la cafetera palentina, con fábricas en la capital y en la cercana localidad de Villamuriel de Cerrato. Negros nubarrones se cernían para los más de trescientos trabajadores de esta multinacional. Máxime, cuando poco después el Juzgado de 1ª Instancia e instrucción número 1 de Palencia confirmaba que el concurso era necesario ante la falta de recursos y de materia prima provocó la paralización de la actividad de la empresa. Una delicada situación que se empezaba a solucionar el pasado mes de septiembre tras un intenso proceso judicial, cuando el juzgado autorizaba la deseada venta, que se producía hace un mes a la multinacional asiática Olam por 38,1 millones. Un acuerdo que se suscribía el pasado viernes.

La implicación de la Consejería de Agricultura y Ganadería, y especialmente de su responsable, Silvia Clemente, ha sido clave para que esta empresa palentina pueda sobrevivir y, por ende, se mantengan los puestos de trabajo. La multinacional asiática Olam Internacional, con sede en Singapur, está convencida y decidida a convertir a Seda Solubles en la plataforma europea del mercado del café así como el impulso de nuevos proyectos. Su apuesta es clara por las fábricas de Palencia y Villamuriel y tiene pensado invertir más de cinco millones de euros en los próximos dos años para, de momento, afianzarse y mantener los importantes activos de que dispone.

Olam espera, además, que produzca un beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones de un 20 por ciento, y se ha comprometido a mantener la plantilla y el mercado en el que opera Seda Solubles y tiene previsto incentivar nuevos proyectos e inversiones. «La empresa será fundamental para todo el grupo. Queremos crecer, no solo en nuevos productos, sino en aquellos que vayamos adquiriendo, y uno de ellos es el café». Son palabras de Víctor Casas, responsable de la Olam en España y encargado de la operación de compra de Seda Solubles, quien destaca que el objetivo de la multinacional asiática es crecer con rapidez. La empresa palentina cuenta con una plantilla de 314 trabajadores, que se encuentran bajo un Expediente de Regulación Temporal de Empleo, repartidos entre las fábricas de Palencia y Villamuriel de Cerrato, así como las oficinas centrales en Madrid.

En la actualidad, el grupo cuenta con 17.000 empleados en 65 países y una facturación global de 15.700 millones de dólares, dedicada a la gestión del suministro de materias primas agrícolas e ingredientes alimentarios. Su negocio se basa en cuatro ejes: materias primas agrícolas, alimentos envasados, fertilizantes y servicios financieros a materias primas. Tienen 11.600 clientes en todo el planeta, algunos de ellos de la talla de Nestlé, Kraft Foods, Lavazza o Mars. Una de las principales características del negocio de Olam es su implantación en toda la cadena de valor, desde la agricultura, pasando por la logística y transformación, hasta el comercio y distribución de los productos al cliente. Este modelo flexible permite a la multinacional un crecimiento rápido, competitivo en costes y beneficioso, lo que les acerca al objetivo de la creación de valor.