Sociedad

Los castellanos y leoneses se divorcian menos que el resto de los españoles

Al año se producen alrededor de 4.000 rupturas, la mayor parte en Valladolid, León y Salamanca

Familia con padres divorciados y con un régimen de custodia compartida de su hija
Familia con padres divorciados y con un régimen de custodia compartida de su hijalarazon

Los castellanos y leoneses se divorcian menos que el resto de los españoles. Así lo demuestra un estudio realizado por el Consejo General del Poder Judicial.

Según el mismo, la Comunidad se mantiene a la cola en disoluciones matrimoniales durante los últimos tres años. De hecho es la Comunidad con un menor número medio anual de demandas por cada 100.000 habitantes, lo que incluye divorcios y separaciones, consensuadas o contenciosas.

En total, en 2016 en la Región se contabilizaron 4.063 rupturas, de las que 3.865 fueron divorcios, 196 separaciones y dos nulidades, lo que supone un descenso del 7,1 por ciento con respecto a 2015, cuando hubo 4.337 casos.

A nivel nacional se produjeron un total de 101.357 rupturas matrimoniales. Esto significa una bajada del 4,3 por ciento respecto al año anterior. Por tipo de proceso, se produjeron 96.562 divorcios, 4.652 separaciones y más de 140 nulidades.

En cuanto al número de rupturas registradas en el primer trimestre de este año, aumentaron un 4,8 por ciento respecto al mismo periodo de 2016, al pasar de 1.202 a 1.258. Esta subida fue igual a la registrada en el conjunto de España.

Con estas cifras, la Comunidad cuenta con la tasa de rupturas más baja de todo el país con 0,5 demandas de discolución por cada mil habitantes. En el lado contrario se sitúan Cantabria, Cataluña y Valencia, con una tasa del 0,8.

En la Región se registraron entre enero y marzo 1.189 divorcios, de los que 702 fueron consensudos, y 69 separaciones, más de la mitad de mutuo acuerdo.

Por provincias, en las que más parejas se separan es en Valladolid, León y Salamanca, seguidas de Burgos, Palencia y Zamora. Donde menos disoluciones matrimoniales se registran es en Segovia, Ávila y Soria. Tras la entrada en vigor de la Ley por la que se modificó el Código Civil en materia de saparación y divorcio, que supuso la eliminación de los plazos previos, se produjo un importante crecimiento de las demandas de disolución entre 2005 y 2006.

A partir de 2007 y hasta el 2009, al desaparecer el impacto inicial de la norma y deharse sentir los primeros efectos de la crisis, el números de peticiones descendió y desde ese año las cifras se mantienen estables. Otro de los efectos de la mala marcha de la economía fueron las modificaciones en las demandas, ya que un gran número pasaron de demandas contenciosas a consensudas, lo que supone una importante reducción de los gastos de ruptura.

Mientras que en el año 2006 apenas 13.145 parejas cambiaron sus demandas, en el 2016 lo hicieron 44.231 matrimonios.

Finalmente, el número de peticiones redivadas a mediación familiar también ha ido incrementándose anualmente, hasta llegar a los 7.300 casos en 2016.