Los empleados de Caja España-Duero se asoman a la huelga al no llegar el acuerdo

Mañana, el viernes y el lunes. Son las fechas marcadas como jornadas de huelga para los trabajadores del Banco Ceiss -derivado de la unión entre Caja España y Caja Duero- en caso de no llegar a un acuerdo la empresa y los representantes de la plantilla.

Pese a que sí lograron movilizar a varios miles de empleados y familiares en las protestas focalizadas en las sedes de la Plaza de los Bandos, en Salamanca, y el Palacio de Botines, en León, y a haber conseguido que los paros de 15 minutos durante los últimos días -hoy tiene lugar otro-, los sindicatos en la mesa de negociación parecen no querer ir de la mano y dar ejemplo de esa unidad que piden a quienes representan.

Tras la sexta reunión para abordar el expediente de regulación de empleo (ERE), que en principio llevará a prescindir de 1.320 nóminas, de las 4.700 actuales, los sindicatos UGT y Csica aceptaron rebajar al 65 por ciento el salario bruto a percibir por prejubilados, un techo de 200.000 euros para salidas voluntarias, 200 suspensiones de contrato y la supresión de la parte variable del plus de convenio existente.

Desde Comisiones Obreras consideraban esos apartados junto con el conjunto del planteamiento de la parte patronal como «una propuesta de semi cierre». UEA, por su parte, se mantiene al margen del resto de plataformas sindicales, pero no se opone a acuerdos.

Según pudo saber este periódico, la empresa aceptaría la propuesta de rebajar a la mitad los pluses funcionales y pasaría de un 13 a un 12 por ciento la rebaja salarial estructural, que afectará a todos los conceptos retributivos personales. Por tanto, más a quienes más cobran, que en muchos casos bordean la prejubilación. De igual manera, acepta suspensiones de contrato voluntarias y rotatorias que entre ambas no podrán ser más de 100 y eleva la prima de adscripción a las bajas incentivadas a 15.000 euros.

No contempla el incremento porcentual en extinciones de quienes cumplan o tengan 56 años en 2013, porque «dispararía costes».

La próxima reunión sobre el ERE tendrá lugar esta mañana.