Salamaq se alza como la feria de referencia del sector ganadero por su calidad y diversida

La Feria Salamaq es ya un referente en el sector. Sus más de 43.000 metros cuadrados de exposición y los 1.678 ejemplares que integran la 31 Exposición de Ganado Puro así lo reflejan.

El éxito de visitantes y profesionales del sector ha llevado también a un aumento en su presupuesto, que roza los 900.000 euros, y todo para mantener la calidad y diversidad de este encuentro que reúne a 537 expositores de toda España, así como de países vecinos como Portugal, Francia o Alemania.

Nadie quiso perderse la inauguración de esta cita, a la que acudió el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, acompañado por el consejero del ramo, Jesús Julio Carnero y otras personalidades, como el presidente de la Diputación Provincial, Javier Iglesias, quien calificó a Salamaq como «la joya de la corona».

En este sentido, quiso aprovechar la ocasión para lamentar la «falta de intención clara y rotunda por parte del presidente del Gobierno para mantener las ayudas actuales de la PAC», por lo que adviritó que «a menos PAC, más despoblación».

Iglesias instó a Pedro Sánchez a «dar respuesta con ayudas concretas», como las que se impulsaron hace dos años con la reducción de los módulos fiscales o créditos blandos. En ese sentido, animó a «llevar a buen puerto» las negociaciones que son importantes.

El presidente de la institución provincial también pidió a la Junta de Castilla y León y a su presidente la necesidad de «tomar medidas» que faciliten nuevas oportunidades en el mundo rural.

Según insistió, «es prioritario» impulsar acciones encaminadas a la creación de nuevas empresas vinculadas a la industria agroalimentaria, con la simplificación de trámites y la creación de estímulos que favorezcan el asentamiento de población.

Por ello, remarcó que el Ejecutivo autonómico «debe dar pasos valientes y decididos» para flexibilizar la aplicación de normas en la sanidad animal. Por ello, dijo «estar convencido» de que se puede ser igual de rigurosos en el control sanitario, sin perjudicar la rentabilidad de las explotaciones ganaderas.