Barcelona obligará a que el 30% de la vivienda nueva sea asequible

A la espera de que la Generalitat dé el visto bueno, la medida contó con un amplio apoyo. Votaron a favor BComú, PDeCat, ERC, PSC y la CUP.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, volvió a emocionarse ayer en el pleno municipal. Motivos tenía, teniendo en cuenta que cada vez falta menos para las elecciones municipales, Colau pudo, por fin apuntarse un tanto. El pleno aprobó de forma provisional la reserva del 30% para vivienda protegida en las nuevas promociones privadas y grandes rehabilitaciones, siempre y cuando la Generalitat dé el visto bueno. La medida, además, tuvo un amplio apoyo de los grupos. Votaron a favor BComú, el PDeCAT, ERC, PSC, la CUP y los dos concejales no adscritos. Cs se abstuvo y el PP votó en contra. En la misma línea, el pleno dio luz verde a declarar toda la ciudad como zona de tanteo y retracto para que el Ayuntamiento tenga preferencia en la compra de pisos y solares cuando se pongan en venta.

La teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, defendió la medida dado que supone «un cambio histórico» que era «irresponsable no haber hecho antes». Por lo que confió en que la reserva del 30% «se extienda como una mancha de aceite al resto de ciudades». Sanz aseguró que los pisos resultantes del 30% tendrán un precio medio de 510 euros al mes en régimen de alquiler y 130.000 euros de compra.

Tras un acuerdo de última hora, el PDeCAT votó a favor. Ahora bien, el concejal Jordi Martí advirtió de que no es suficiente para poner fin al problema de la vivienda y que el sector de la construcción podrá impugnarla. En este sentido, Jordi Coronas (ERC) pidió «generosidad al sector privado» porque «si vuelve a haber una crisis, ellos la van a sufrir».

Jaume Collboni (PSC), a su vez, lamentó que el gobierno de BComú apenas «ha cerrado medidas puntuales» de vivienda, mientras que la medida del 30% ha sido impulsada por entidades sociales. Desde Ciudadanos, Koldo Blanco acusó al gobierno municipal de actuar «de forma precipitada al no tener el consenso mayoritario» del sector inmobiliario y recordó, para justificar su abstención, que que todavía falta la aprobación de la Generalitat. Por ello, Alberto Fernández (PP) señaló que «quizás va de grandes fuegos artificiales, pero al final no se aprueba».

La obligación del 30% de vivienda asequible se aplicará a las nuevas licencias que se tramiten a partir de la aprobación definitiva, excepto las que acrediten transacciones efectuadas -compra de solar- entre el 1 de julio de 2016 y la aprobación inicial.

La medida que declara todo el municipio de Barcelona como área con derecho de tanteo y retracto se aplicará durante seis años, prorrogables a otros seis, e incluirá edificios plurifamiliares, propiedades verticales, terrenos sin edificar, edificaciones en mal estado, viviendas sometidas al impuesto de viviendas vacías y viviendas protegidas.