Colau dice ahora que debe analizar el hotel de la torre Agbar

Después de que el viernes pareciera que el grupo Emin Capital había encontrado un resquicio legal para tirar adelante el proyecto de hotel de la torre Agbar, la reacción ayer del Ayuntamiento de Barcelona supuso un jarro de agua fría para sus aspiraciones.

Los propietarios del edificio emitieron un comunicado el jueves, en el que anunciaban que podrían sacar adelante el hotel. El Ayuntamiento respondió que «no había ningún trato de favor», pero admitía que «por imperativo legal», con un certificado urbanístico que el fondo de inversión envió antes de la moratoria hotelera, podían esquivar el veto. No obstante, en apenas 24 horas, la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, matizó la postura del Ayuntamiento y puntualizó que aunque la torre Agbar no está afectada por la moratoria, el Consistorio puede tumbar el proyecto de hotel. «Lo que permite el certificado es que presenten una solicitud de licencia. Esto es lo que dice la ley y eso es lo que puede hacer ahora Emin Capital. Por eso creemos que Emin Capital ha precipitado». Es decir, según el Consistorio, con el documento esgrimido por la empresa, los propietarios pueden iniciar los trámites para pedir la licencia, pero, una vez presentada, el Ayuntamiento estudiará el proyecto y decidirá si les concede el permiso. En la práctica esto supone que el hotel queda en suspenso y que su construcción depende del Ayuntamiento.

La concejala aseguró que «la resolución de la licencia está sujeta a la moratoria y, por tanto, a la suspensión de licencias. No podemos desligar el proyecto de la suspensión y el debate del modelo turístico de la ciudad de estos atajos legales que sí permiten que hagas una solicitud de licencias». Sanz añadió que no aceptarán presiones de ningún tipo a la hora de definir el modelo turístico.

Esta versión choca con la de los propietarios, que daban por hecho la construcción del hotel. Emin Capital, el viernes, incluso detuvo la medida de apagar las luces de la torre como ahorro y en protesta por la postura del Ayuntamiento. Otro de los afectados por la moratoria es el edificio del Deutche Bank, en el que se preveía construir un hotel, pero la compañía no comenzó los trámites antes de la suspensión de licencias de alojamientos turísticos. Ahora, el Ayuntamiento estudia caso por caso todos los posibles proyectos hoteleros.

Críticas

El líder del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, pidió ayer a alcaldesa, Ada Colau, que promueva la actividad económica y que «no ahuyente y no ponga en peligro la inversión y la creación de empleo». Fernández lamentó la moratoria hotelera que ha impulsado Colau porque considera que «es un chollo para Badalona, Santa Coloma y l’Hospitalet». Reclamó «seguridad jurídica» para la actividad económica de Barcelona, y ha lamentado que se haya establecido esta moratoria hotelera en toda Barcelona, incluso en los barios o distritos dónde, según él, no hay conflicto turístico.

La líder de C’s al Ayuntamiento de Barcelona, Carina Mejías, advirtió que la alcaldesa, Ada Colau, «sólo acierta cuando rectifica». «Su actitud no ayuda a combatir la pobreza y la desigualdad en la ciudad”, aseguró Mejías.