Sanidad

El Hospital de Sant Pau pide ser intervenido para asegurar su futuro

Los problemas judiciales han complicado la viabilidad del centro

Sant Pau busca soluciones ante una situación complicada tras numerosas demandas
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Los problemas se acumulan para el Hospital de la Santa Creu y Sant Pau de Barcelona, que busca una salida ante sus problemas económicos y las numerosas demandas de sus trabajadores. El patronato que gestiona el centro ha pedido a la Generalitat que lo intervenga temporalmente para garantizar su viabilidad y que avale las actuaciones de su equipo directivo. El Hospital de la Santa Creu y Sant Pau está gobernado por el Patronato de la Fundación de Gestión Sanitaria, en el que están representadas la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y el Arzobispado de Barcelona.

El centro quiso hacer público ayer un comunicado del presidente del patronato, Xavier Pomés, en el que explica que en su reunión del pasado día 4 de abril este organismo acordó instar al Protectorado de Fundaciones del departamento de Justicia que tome las actuaciones jurídicas pertinentes con el objetivo de garantizar el futuro del centro. Para el presidente del patronato, «esta se debe ver como la última oportunidad que tiene el centro tras muchos años de conflicto».

Garantías

Concretamente, la entidad ha pedido al protectorado que dé al Hospital de Sant Pau «las garantías a todos los procesos que se deban iniciar en el futuro, tanto a nivel de Patronato como del equipo de gestión», y «total garantía jurídica a las actuaciones de los miembros del personal de dirección del hospital». También solicita que tome las actuaciones jurídicas para «decretar en cada momento y circunstancia aquellas decisiones que, ajustadas a derecho, se consideren más apropiadas dadas las necesidades del hospital».

Pomés puntualiza que «esta es una actuación de cariz temporal, que busca garantizar la viabilidad y la recuperación de la autonomía del centro pero, en caso de no ser así, obligue a una total reestructuración». «La voluntad del patronato es continuar haciendo todos los esfuerzos para luchar por la viabilidad y gobernabilidad del hospital», asegura Pomés en el comunicado, en el que hace un llamamiento al compromiso de todos los estamentos del centro.

Desde hace más de dos años, el Hospital de Sant Pau está inmerso en un conflicto laboral, que en buena parte debe resolverse en los tribunales. Si la Generalitat acepta la intervención, la condición para recuperar la autonomía pasa por volver al equilibrio económico. La intervención de Justicia no tiene un periodo cerrado, sin que se realizará hasta que se lleven a cabo unos ajustes. La apuesta del centro es potenciar la actividad y también barajan abrirse a la actividad privada, atendiendo a extranjeros o con una cartera de servicios que no esté en la sanidad pública.