El nuevo inspector general del Ejército pide «ser fuertes y eficaces» en las misiones internacionales

Barcelona- El teniente general Ricardo Álvarez-Espejo, madrileño de 59 años, apeló ayer a las Fuerzas Armadas a dar lo mejor de sí mismas para desempeñar con «fuerza y eficacia» las misiones internacionales encomendadas. Lo hizo, precisamente, en el acto de toma posesión de su cargo como nuevo inspector general del Ejército en el Palacio de Capitanía de Barcelona. A la ceremonia asistieron la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna, la vicepresidenta del Gobierno catalán, Joana Ortega y el Jefe del Estado Mayor del Ejército, Jaime Domínguez Buj.

Álvarez-Espejo, que sustituye en el cargo al teniente general José Manuel Muñoz, será responsable de la infraestructura, mantenimiento y seguridad de los cuarteles militares, así como los riesgos laborales del personal que trabaja en ellos.

El nuevo inspector general evocó los «duros recortes» que el Ejército ha padecido últimamente, pero garantizó que las fuerzas armadas están preparadas para «asumir y afrontar los sacrificios que sean necesarios», conscientes de las dificultades. Álvarez-Espejo se comprometió también a cooperar con todas las autoridades institucionales para «impulsar, e incrementar aún más si cabe, la consolidada integración» de las Fuerzas Armadas en la sociedad, así como para «fomentar la cultura de Defensa». El teniente general ha participado en misiones internacionales en El Salvador, Bosnia-Herzegovina, Kosovo, Afganistán y Líbano.