Cataluña

La ANC advierte a Mas que no apoyará una consulta ambigua

La Razón
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La presidenta de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Carme Forcadell, ha sido una fiel escudera de Artur Mas desde que el presidente de la Generalitat se prestó a impulsar el proceso soberanista, pero hay algo que podría poner fin a su idílica relación y es abrir la consulta a terceras vías como la federalista. No lo aceptará.

«En la ANC estamos convencidos de que antes de Navidad habrá fecha y pregunta para la consulta y queremos que esa pregunta sea clara, que se responda con un "sí"o un "no"y debe responder a si Cataluña ha de ser independiente, porque otra cosa sería un fraude hacia la sociedad catalana y estaríamos en contra de la consulta». «No podemos preguntar sobre el federalismo. La gente no ha salido a la calle el año pasado en una manifestación o este año en la "Vía Catalana"por el federalismo», sentenció.

De esta manera, la ANC –que ha actuado hasta ahora como brazo civil del Govern en el proceso soberanista– cerró la puerta a una consulta que recoja planteamientos federalistas o confeeralistas como pretenden PSC, Unió e ICV. Forcadell, no obstante, se mostró convencida de que habrá consulta, pero indicó que si finalmente ésta no pudiera producirse por la oposición del Estado, entonces la ANC pediría al gobierno de Cataluña la declaración de independencia unilateral «de acuerdo con el derecho internacional».

En cualquier caso, Forcadell destacó que la Assemblea trabaja para que se pueda votar y para ello está llevando a cabo un plan de acción que, en última instancia, no descarta la convocatoria de una nueva movilización social masiva. «CiU y ERC llegarán a un acuerdo porque son conscientes de su responsabilidad histórica, pero si finalmente no hay pregunta ni fecha de consulta antes de Navidad, la ANC tiene elementos de presión. Haremos una gran movilización, pese a que estamos convencidos de que cumplirán los plazos», advirtió.

Empresarios y UE, a favor

La presidenta de la ANC confía en que, de convocarse una consulta, la opción independentista sería la mayoritaria y recibiría el apoyo de todos los sectores. Sobre el mundo empresarial catalán, Forcadell señaló que «el tejido empresarial es principalmente mediana y pequeña empresa y, pese a que no han manifestado su postura, estarán a favor». «Sólo un gran empresario ha mostrado abiertamente su oposición» al proceso soberanista, en referencia al presidente del Grupo Planeta, José Manuel Lara.

En la misma línea valoró la actitud de los estados de la UE, sobre los que comentó que «no se posicionarán hasta que nosotros no hagamos algo, no nos movamos ¿Para qué buscarse problemas con España antes de tiempo? Una vez demos el paso, nos reconocerán», aseguró Forcadell.

En cualquier caso, la ANC parte de una premisa clara: «El proceso hacia la independencia ya no tiene marcha atrás». Forcadell sustentó esta afirmación en la pérdida de la sensación de miedo por parte de la sociedad civil catalana, que a la vez está convencida de que ya no existe alternativa a la independencia, ya que el rechazo del Estatut por parte del Constitucional en 2010 supuso «una humillación muy fuerte».

Además, Forcadell identificó la crisis económica como otro de los factores que ha convertido en irreversible este movimiento independentista, sobre todo en lo relativo a las infraestructuras, ya que a su parecer la difícil situación económica «ha hecho ver que nos está tocando suportar el peso de esta crisis más que a otras partes del país».