Cataluña

La Cambra pide bajar impuestos y el Govern prepara la subida para 2014

La Razón
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No es una leyenda urbana, Cataluña tiene el tercer tipo de IRPF más alto del mundo. Lo corrobora un informe comparativo de la consultora KPMG. Las rentas más altas, superiores a 300.000 euros, pagan un IRPF de hasta el 56 por ciento, un tipo marginal superado solo por Suecia (65,6 por ciento) y la isla caribeña de Aruba (58,95 por ciento). En un escenario de crisis económica, en el que abundan las voces que denuncian que la política de austeridad impuesta por la Troika –el BCE, la Comisión Europea y el FMI–, bajo la batuta de Alemania, no está ayudando a salir del pozo, la Cámara de Comercio de Barcelona se unió ayer a quienes defienden una bajada de impuestos para animar a actovar el consumo.

El presidente de la institución, Miquel Valls, instó al Govern a «bajar impuestos» o, como mínimo, a no subirlos más para favorecer así la recuperación de la demanda interna y de la economía.

En una entrevista con la agencia Efe, Valls dio ideas al president de la Generalitat, Artur Mas, sobre cómo abordar esta rebaja. Le recordó que la Generalitat tiene competencias sobre el tramo autonómico del IRPF, por ejemplo, y sobre otros impuestos cedidos, por lo que podría estudiar una rebaja sobre una «cesta» de impuestos. También le pidió que reconsidere la idea de volver a implantar el impuesto de sucesiones, una iniciativa recogida en el acuerdo de legislatura firmado por CiU y ERC, a propuesta de los republicanos.

En el caso de que no logre llegar a un pacto para bajar impuestos, Valls aconsejó a Mas que como mínimo introduzca incentivos fiscales en los impuestos como el de Actos Jurídicos Documentados o en el de Transmisiones Patrimoniales, que el gobierno catalán acaba de subir y que gravan, por ejemplo, la compraventa de viviendas de segunda mano.

Valls comprende que la situación financiera de la Generaltitat es delicada, más aún, cuando para 2014, el Gobierno ha impuesto un techo de déficit del 1 por ciento, que obligará a hacer un reajuste extra de 2.000 millones. Como alternativa a rebajar impuestos, el año pasado ya propuso eliminar el 20 por ciento de las 254 entidades públicas para ahorrar 2.756 millones. También propone vender patrimonio.

Decida lo que decida mañana el Govern, si prorrogar los presupuestos, tramitar unos nuevos o negociar unas cuentas conjuntas para 2013 y 2014, hasta el año que viene, no se aplicarán los impuestos que ERC y CiU acordaron crear o subir en su acuerdo de legislatura. ERC, la instigadora de aumentar la presión fiscal, quiere que los impuestos recogidos en el pacto entren en vigor en 2014.

La intención de ERC, según explicó ayer a Europa Press su secretaria general, Marta Rovira, es negociar la aplicación de los nuevos tributos, entre septiembre y diciembre, en paralelo a la negociación de los presupuestos de 2014. Da por hecho la prórroga, pese a que el primer secretario del PSC, Pere Navarro, asegurara ayer que hay una cláusula oculta en el pacto CiU-ERC que avala unas cuentas con un déficit del 1,5 por ciento. Cabe recordar que miembros del Govern han dicho que es «imposible» elaborar unos presupuestos con el déficit del 1,58 por ciento fijado por Hacienda.

Si ERC impone el acuerdo que firmó con CiU, en 2014, Cataluña tendrá nueve impuestos nuevos: uno sobre depósitos bancarios, una modificación del impuesto de Patrimonio y Sucesiones, además de tasas sobre grandes superficies comerciales, bebidas azucaradas, nucleares, viviendas desocupadas y la euroviñeta para camiones.