La fallecida por meningitis no había sido vacunada

Un nuevo caso despierta la alarma pero Salud descarta una epidemia.

Tres casos de meningitis han sembrado la alarma en los colegios de Cataluña, y, en menor medida, en parte de la población.A la muerte de este día de una menor en Manresa, siguió ayer el asunto. Una niña de un año de Berga está ingresada en el Hospital de Sant Pau de Barcelona afectada por una meningitis de tipo vírico, y por lo tanto no contagiosa, con un buen pronóstico de evolución, según informó el departamento de Salud.

Este caso de meningitis se suma a otros dos anteriores ocurridos el mes de marzo, en los que fallecieron una niña de nueve años, y un niño de tres años de Girona, ambos de forma fulminante. Salud explicó que los dos casos mortales no tienen relación entre sí, y de que el de la bebé de Berga es diferente a los anteriores, ya que se trata de una meningitis de tipo vírico y no bacteriano, por lo que no es necesario tratar con medicamentos al entorno escolar y familiar de la pequeña.

Ayer se reunió a los padres de los alumnos de uno y dos años de la escuela Vedruna, de Berga, a donde asiste la pequeña ingresada en Barcelona, para informarles y resolver dudas acerca de esta situación.

No obstante, la conselleria reaccionó. El secretario de Salud Pública, Joan Guix, anunció ayer que la niña fallecida de Manresa a meningitis de tipo C no había sido vacunada, pese a figurar en el calendario oficial. Explicó que existe la sospecha de un cuarto caso de esta enfermedad en otro niño, residente en la zona centro de Cataluña, y que debió ser trasladado a un centro hospitalario de Barcelona.

El secretario de Salud Pública, junto con otros responsables de Salud de la Generalitat, y el jefe del servicio materno–-infantil del Hospital Sant Joan de Déu, de Manresa, Santi Nevot, pidió tranquilidad tras conocerse los tres casos. «No consta la vacuna en la cartilla» de la pequeña de nueve años, que falleció de forma fulminante en el hospital Parc Taulí, de Sabadell, al que fue trasladada desde el Hospital General de Manresa.

Nevot precisó, por su parte, que el desarrollo de la enfermedad en el caso de esta niña fue muy rápido y falleció «en tres o cuatro horas», tras diseminarse la bacteria del meningococo de la faringe.