«La idea es hacer un vino para la gente corriente, una Xibeca de los vinos»

Entrevista a Luis Barrero, copropietario y fundador del proyecto Viñedos Singulares

–¿Qué es Viñedos Singulares?

–Es un proyecto que selecciona vinos de calidad entre las diferentes denominaciones de origen a para presentar y difundir la variedad y riqueza vinícola autóctona. En resumen, nos dedicamos a seleccionar vinos en regiones históricas españolas y comercializarlos.

–¿Cómo nace el proyecto?

–Nosotros somos la segunda generación de un negocio familiar dedicado a la comercialización de vinos en Cataluña desde 1971 y en el 2007 decidimos dar este salto a hacer vinos como entendíamos que nuestros clientes y el público final estaba demandando. Nosotros tenemos la percepción de que en el mundo del vino se hablaba solamente del que hacía un vino de 100 euros y 100 puntos Parker y en realidad, la gente corriente no puede tomar vinos de 100 euros ni de 100 puntos Parker. Entonces, la idea del proyecto es hacer cosas con calidad, con buena imagen, pero a su vez que todo el mundo pueda permitirse.

–Trabajáis con vinos singulares. ¿Dónde reside la singularidad de los vinos? ¿Qué criterios seguís para seleccionar los vinos?

–La singularidad radica en que están elaborados a partir de unos viñedos y variedades muy determinadas, que son variedades históricas españolas y de ahí su singularidad. En cuanto al proceso de selección, nos fijamos en criterios de rastreo en las zonas de producción que más nos gustan.

-¿Aún hoy en día es posible encontrar esos vinos tan especiales, que no se comercializan todavía a gran escala?

-Es posible encontrar grandes viñedos olvidados o muy, muy viejos, con variedades que en ningún sitio del mundo puede haber más que aquí. Y lo que nosotros intentamos es poder transformar y elaborar ese tipo de vinos y comercializarlos con precios razonables, para todos los públicos.

– ¿Cómo se localizan estos viñedos?

-Aunque somos jóvenes, nosotros llevamos toda la vida metidos en esto. Eso va un poco ligado a la experiencia. Por ejemplo, el Rueda es una cosa súper generalizada y el 90% se produce en Valladolid, pero nosotros producimos donde solamente se produce el otro 10%, que es en la provincia de Segovia. ¿Por qué? Pues porque descubrimos esos viñedos.

–Estos vinos, que cada uno tiene su propia singularidad, ¿comparten un hilo conductor, algo en común?

–El hilo conductor es que son vinos atractivos, tanto por fuera como por dentro, y sobre todo es que son vinos que para beberlos no necesitan de un manual de instrucciones, ni una súper técnica de cata. son vinos para disfrutar en cualquier momento del día.

–¿Y a la hora de seleccionar estos vinos también tenéis en cuenta, como vosotros decís, que «enamoren a la gente de Barcelona»?

-La historia de crear este proyecto era también un poco para que la gente joven, que es al final el público que tenemos que captar, se acerque al vino. En España hemos pasado de entender el vino como un alimento más, a tomarlo a granel y estar presente en nuestras comidas y cenas y ahora si bien España es el segundo país productor de vino del mundo, nuestro consumo por cápita desciende cada año de forma alarmante. Con estos ingredientes en la coctelera, como no inventes algo nuevo para atraer a toda esa gente joven que toma cerveza o refresco, mal vamos. Y, por ejemplo, los vinos con fruta, fáciles de beber, son los que pueden acercar a la gente joven al vino y si la gente joven no se acerca al vino seguirá bajando el consumo cada año.

–¿Qué papel juega en el éxito de un vino su presentación, el embotellado, el nombre, la etiqueta...?

–Muchísimo. La saturación en el mercado es brutal y la forma de convencer de inicio a un potencial cliente es por los ojos. Si luego no le gusta, no repetirá, evidentemente, pero el tener una imagen cuidada es fundamental para estar en el mercado. Y dentro del proyecto de «Viñedos Singulares», la imagen desde el primer día entendimos que era una parte fundamental. Así, el diseñador de nuestro proyecto es Xavi Bas, seguramente el ilustrador y creador de etiquetas más caro de España, pero nosotros siempre tuvimos claro que no íbamos a contratarle para hacer vinos con súper valor añadido, sino para hacer vinos con buena relación calidad-precio, reduciendo los márgenes e intentando generar un volumen importante. Nuestra idea es hacer el vino que puede tomar la gente corriente, somos la Xibeca de los vinos. Las cervezas artesanales están muy bien pero una cerveza artesana vale 2 o 3 euros y la gente al final lo que toma es una cerveza normal y corriente, la típica. Y en el caso de los vinos pasa lo mismo.