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Cataluña

Los catalanes somos gente legal

La Razón
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La próxima semana celebraremos la Diada de Cataluña, una festividad que nos ha sido robada a todos los catalanes que nos sentimos también españoles. La que debería ser una fiesta de todos, como la de los andaluces el 28 de febrero, los gallegos el 25 de julio o los valencianos el 9 de octubre, por poner tres ejemplos, un motivo de celebración entre todos los catalanes, ha sido secuestrada por el Govern y los partidos separatistas. La que era la fiesta de todos los catalanes se ha convertido en una sucesión de festivales independentistas.

Este hecho, que es más que evidente, no hace que los catalanes que también nos sentimos españoles dejemos de celebrar nuestro día. No vamos a renunciar a lo que somos. Queremos seguir reivindicando la Cataluña emprendedora, innovadora y competitiva, la que es reflejo de una sociedad abierta y plural. Cataluña ha sido y es tierra de acogida, donde se ha disfrutado de una convivencia integradora y de cohesión social. Estos valores son los símbolos de Cataluña que más orgullosos nos deben hacer sentir y de los que no nos vamos a desprender.

Ahora, que pretenden arrebatarnos lo que somos, es cuando más unidos debemos estar todos aquellos que no queremos levantar fronteras sino superar obstáculos. La unión de los que queremos construir y no destruir. Así hemos sido siempre los catalanes aunque pretendan hacernos creer lo contrario los que enarbolan la estelada y han abandonado la senyera. Los que inventan falsos agravios y buscan menospreciar el valor de España, no hacen sino trabajar en contra de todos los españoles y por lo tanto también de los catalanes.

Corremos el peligro de que se identifique a la totalidad de catalanes con aquellos que de manera beligerante se dedican desde tribunas oficiales a alimentar agravios y confrontaciones, aquellos que se han inventado un relato en contra de España para justificar su propia incapacidad para gobernar. Debe quedar claro que no todos somos así, que la mayoría de de los catalanes seguimos basando nuestros valores en el respeto a la ley y en el proyecto compartido que es España. Estos valores siempre nos han hecho respetables en todas partes. Que nadie se lleve a engaño, los catalanes somos gente legal.

Quiero lanzar un mensaje de optimismo porque no me resigno. Porque no podemos permitir que nos quiten lo que es nuestro. Porque queremos seguir viviendo en concordia en el marco de nuestras leyes democráticas. Dejemos de lado partidismos y aunemos esfuerzos. Debemos recuperar los valores que han hecho que los catalanes seamos respetados y queridos en el resto de España, el espíritu dialogante, el respecto a los pactos y el valor de nuestra palabra.

Cataluña y el resto de España tienen una historia conjunta y mucho futuro por delante. Mientras Artur Mas quiere una Cataluña atada a un pasado que nunca existió, nosotros la queremos esperanzada en un futuro mejor, dentro de España y de la Unión Europea.

Nuestras amistades, nuestros vínculos afectivos, laborales, se sustentan en que todos formamos parte del mismo país, que es un gran país y ésta es la razón fundamental por la que somos más fuertes juntos. No se trata de lo que perderíamos los catalanes con la independencia sino de lo que ganamos ahora y en el futuro siendo parte de España. Somos y seguiremos siendo gente legal.