Pascal y Bonvehí liquidan a la vieja guardia de CDC en su candidatura a la ejecutiva

Santi Vila y Mercè Conesa aspiran a presidir el consell nacional del PDC para lograr una plaza en la dirección del partido.

Aunque la sombra de Artur Mas como líder es muy alargada, la nueva Convergència quiere proyectar un mensaje muy claro de renovación. Los jóvenes dirigentes llamados a tomar las riendas del Partit Demòcrata Català (PDC), Marta Pascal y David Bonvehí, cerraron ayer la lista de doce nombres que aspirarán a copar la dirección nacional del nuevo partido independentista. Pascal encabeza la candidatura como coordinadora general y Bonvehí la secunda como coordinador organizativo. El resto son, en su mayoría, cuadros que rondan los 40 años (siete de ellos son alcaldes) y no hay rastro de los antiguos pesos pesados de Convergència.

La lista no es definitiva, ya que los asociados del PDC pueden prescindir de alguno de los nombres porque la votación se hará con un procedimiento desbloqueado. Es decir, que en función de las votaciones podrían buscarse figuras que inspiren más consenso. En todo caso, la presencia de cuadros que no han estado en la primera línea de CDC es una pista muy clara del rumbo que se está marcando en el nuevo partido independentista.

La candidatura encabezada por Pascal y Bonvehí tiene todos los números para imponerse en las votaciones de los días 22 y 23, ya que cuenta con el aval de Mas y de buena parte de las familias de la antigua CDC como Llibergència, Generació Llibertat y los socialdemócratas agrupados en torno al conseller Josep Rull. Tan aplastantes son sus apoyos que el único adversario que había logrado construir otra candidatura, el ex conseller Germà Gordó, optó por retirarla ayer mismo, al cabo de pocos minutos de presentarla. «Es un buena candidatura y que puede ser de un cierto consenso», dijo Gordó sobre la lista encabezada por Pascal y Bonvehí. Subrayó, además, que tiene «la sensación de que puede ser bien visualizada por Artur Mas», pese a que no se haya pronunciado públicamente. «Hemos creído oportuno retirar nuestra candidatura en beneficio de la cohesión del partido», sentenció.

Con el camino prácticamente despejado, el equipo de Pascal y Bonvehí ya puede hacerse a la idea de que el futuro del PDC es suyo. Los siete alcaldes que integran la candidatura son Albert Batet (Valls), Montserrat Candini (Calella), Xavier Fonollosa (Martorell), Marc Castells (Igualada), Lluís Guinó (Besalú), Lluís Solé (Deltebre) y David Saldoni (Sallent). La lista se completa con los nombres Elsa Artadi (responsable de la coordinación interdepartamental de la Generalitat), Vanessa Farre y Dolors Tella.

Aunque apenas cuenta con opciones, el presidente de Reagrupament y asociado del PDC, Ignasi Planas, también formalizó su candidatura para ser el coordinador general y tildó de «oficialista» la candidatura de Pascal y Bonvehí. «Somos la candidatura que querrían los votantes del nuevo partido, y los votantes que CDC ha ido perdiendo. Queremos recuperar esta confianza desde la dirección», proclamó Planas. Preguntado por si Pascal y Bonvehí le han ofrecido un puesto en su candidatura, explicó: «Ha habido algún contacto que no me atrevo a calificar de intento de negociación. Nos han comunicado que no preveían ningún acercamiento».

Presidir el consell nacional

En paralelo a estos movimientos, otras figuras de la antigua Convergència como Santi Vila intentan no quedar descabalgadas de la primera línea del proyecto. Hace cuatro años, Vila era uno de los alcaldes (Figueres) con más proyección de Convergència. Hoy es conseller de Cultura pero su futuro es una gran incógnita. Vila se deja querer como alcaldable de Barcelona, pero quiere tener un peso específico en el PDC y la presidencia del consell nacional concede un puesto de forma automática en la ejecutiva.

Por eso presentó ayer su candidatura para presidir el consell nacional del nuevo partido, un organismo que tendrá más peso que nunca porque conducirá los debates internos. Su presidente, en consecuencia, ejercerá una gran influencia. Para lograr este puesto, Vila tendrá que batirse con la presidenta de la Diputación de Barcelona, Mercè Conesa.

Mas y Munté presentan los papeles

El expresidente de la Generalitat Artur Mas y la consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Neus Munté, formalizaron ayer su candidatura de tándem presidencial al Partit Demócrata Català (PDC). «Nos ponemos al servicio de un nuevo proyecto para un nuevo país, para todos sus hombres y mujeres, y os pedimos que nos acompañéis», dice el ex presidente catalán en un apunte en su perfil de Instagram y de Facebook y también en el Twitter del PDC, a pocas horas de que se cerrara el plazo para presentar candidaturas a los órganos de dirección de partido. Mas y Munté se convertirán, con toda seguridad, en presidente y vicepresidenta del nuevo partido independentista, ya que no existe ninguna candidatura alternativa. Según lo aprobado en el congreso fundacional del PDC, ambos cargos tendrán una función representativa y no ejercerán una función ejecutiva, ya que el peso del partido recaerá sobre la dirección nacional. Mas no podrá ejercer el cargo de presidente del PDC durante más de cuatro años, ya que existe una limitación de mandatos y se contarán sus años anteriores como presidente de CDC.