Transporte

Rechazan que Uber cometiera competencia desleal a los taxis

El juez plantea que la ventaja competitiva de operar sin licencia puede recaer en conductores

El juez plantea que la ventaja competitiva de operar sin licencia puede recaer en conductores.

La polémica entre la empresa Uber Systems Spain y los taxis de Barcelona, regresó ayer, a través de un juzgado mercantil. Concretamente, el magistrado desestimó la demanda presentada por la asociación profesional Élite Taxi contra la citada compañía.

Se presentó por competencia desleal porque «no queda probado que las exigencias de licencia» que requiere el sector del transporte sean imputables a esta filial del grupo, y porque hay problemas para identificar el beneficiario de las ventajas competitivas.

Regreso

El servicio de transporte Uber volvió este año a Barcelona tras un prolongado tiempo. Esta plataforma aterrizó en 2014 en la capital catalana, y se retiró al cabo de pocos meses, tras el dictamen de un juez que decretó el cierre de la aplicación, porque sus conductores no tenían autorización para transportar viajeros. La empesa corrigió el rumbo, y opera con licencias de alquiler de vehículos con conductor profesional, según lo sabido hasta ahora.

En la sentencia, el juez considera que los actos de cooperación que de un modo genérico se imputan a Uber «no pueden considerarse desleales ya que la cooperación o soporte a empresas del grupo no puede asimilarse, sin más, a la cooperación o soporte en actividades o servicios que especifícamente pueden reputarse desleales».

El director de Uber en España, Juan Gallardo, señaló este año que «somos conscientes de que cometimos errores en el pasado al llegar a España, pero esta vez queremos hacer las cosas bien». Este tipo de servicio provocó una fuerte polémica en Barcelona, teniendo en cuenta que los taxistas lo tildaron de desleal.

El magistrado fue quien planteó la cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que en diciembre de 2017 dictaminó que la plataforma es un servicio de transporte y que, por tanto, se le podían exigir licencias y otras autorizaciones propias del sector, aunque ahora el juez rechaza la demanda al considerar que no queda claro que Uber SS –una sociedad que da soporte al Grupo Uber– sea quien se aproveche de la ventaja que supone operar sin tener la licencia necesaria.


La demanda presentada por Élite Taxi, que fue admitida a trámite en noviembre de 2014, planteaba que Uber SS había cometido actos de competencia desleal por infracción de normas e infracción de la buena fe porque, pese a defender que sus servicios estaban dentro de la economía colaborativa, en realidad prestaba un servicio de transporte sujeto a normativa. Falta por ver ahora como se desarrollará esta polémica.