El desafío independentista

Vacaciones hasta octubre

El independentismo bloquea la actividad parlamentaria tras el choque entre ERC y JxCat. Los seis diputados procesados por rebelión ya han sido suspendidos de sueldo

Imagen de la reunión de la Mesa del Parlament de ayer, con el presidente, Roger Torrent, junto a Josep Costa y Eusebi Campdepadrós / Efe
Imagen de la reunión de la Mesa del Parlament de ayer, con el presidente, Roger Torrent, junto a Josep Costa y Eusebi Campdepadrós / Efelarazon

El independentismo bloquea la actividad parlamentaria tras el choque entre ERC y JxCat. Los seis diputados procesados por rebelión ya han sido suspendidos de sueldo.

La sombra del bloqueo político en Cataluña no acaba de despejarse. El motivo de la nueva parálisis es la suspensión de los seis diputados procesados dictada por el juez Llarena, que sigue enfrentando a las dos principales formaciones independentistas, JxCat y ERC. Siguen sin ponerse de acuerdo en cómo debe aplicarse –JxCat propone que se aplique la suspensión a todos menos a Carles Puigdemont porque ha sido eximido del delito de rebelión por los tribunales alemanes y ERC aboga por que se aplique a todos por igual– y han abocado al Parlament a quedarse sin actividad hasta octubre, cuando los días 2, 3 y 4 tenga lugar el Debate de Política General.

Hasta entonces, la Diputación Permanente es quien se encargará de una mínima labor legislativa –deberá convalidar dos Decreto-Ley del Govern, por ejemplo–, pero no tendrá gran margen de actuación. Tras el Debate, el 10 y el 11 de octubre se retomará el Pleno suspendido la pasada semana, que tendrá como principales puntos en el orden del día la sesión de control al ejecutivo y el debate sobre la convivencia impulsado por C's. Este calendario, en todo caso, enfureció a toda la oposición por igual. Y es que desde que Quim Torra asumiera la presidencia del Govern a principios de mayo, solo se ha sometido a dos sesiones de control en más de dos meses, una cifra muy exigua.

Lo cierto es que la reanudación de la actividad parlamentaria también cabrá enmarcarla en un contexto particular y previsiblemente intenso. Justo 24 horas antes, el independentismo habrá conmemorado el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, mientras seguirá planeando la posibilidad de convocar unas nuevas elecciones a partir del 27 de octubre, una idea que Puigdemont baraja para intentar catapultar su futuro partido, Crida Nacional per la República –que también celebrará su Congreso fundacional por esas fechas–.

En todo caso, los seis diputados procesados sí que han sido suspendidos ya a nivel económico. La portavoz del Govern, Elsa Artadi, reveló ayer que no cobran del Parlament desde el 13 de julio, cuando fue notificado el auto. Fue la oidora de cuentas del Parlament –responsable de la contabilidad de la Cámara– quien adoptó esta decisión al recibir la resolución judicial sobre Carles Puigdemont y los presos Oriol Junqueras, Josep Rull, Jordi Turull, Jordi Sànchez y Raül Romeva. Artadi, eso sí, quiso puntualizar que «eso no quiere decir que estén suspendidos» sino sólo que «se les ha dejado de pagar desde el 13 julio». Una situación que, a su juicio, «se intentará revertir» en la Mesa del Parlament.