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Agramunt asegura que el PPCV remontará en las próximas elecciones

Recuerda que no gobierna porque otros han pactado hasta con «terroristas»

El presidente del grupo popular en el Consejo de Europa, Pedro Agramunt, durante su comparecencia
El presidente del grupo popular en el Consejo de Europa, Pedro Agramunt, durante su comparecencialarazonfreemarker.core.DefaultToExpression$EmptyStringAndSequenceAndHash@1cade527

El PPCV saldrá de esta porque es «un partido inmenso» y si no gobierna no es porque dejase de ser el partido más votado, sino porque otros han preferido formar coaliciones incluso con «terroristas o independentistas» para aislar a los populares. Esta fue la encendida defensa del PPCV que realizó el presidente del grupo popular en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, Pedro Agramunt, durante su intervención en el Fórum Europa Tribuna Mediterránea.

Aseguró que hasta ahora alemanes, italianos o franceses le transmitían su enhorabuena por el trabajo realizado en la gestión de la salida de la crisis, «ahora me preguntan por otras cosas».

Compareció ante la atenta mirada de los principales dirigentes del PPCV- estaba el presidente Alberto Fabra, la coordinadora general, Isabel Bonig, Rita Barberá y un buen número de diputados- y les aseguró que ganarán las elecciones generales. También restó importancia a los elementos de reorganización interna del partido. «El PP es democrático y toma decisiones democráticas en sus Congresos».

Como buen conocedor del panorama político europeo, Agramunt realizó un repaso por los asuntos de mayor importancia. Hizo especial hincapié en la necesidad de mejorar las relaciones con Rusia puesto que las exportaciones europeas se han visto gravemente dañadas. Mientras que las americanas se redujeron un seis por ciento o las de Japón aumentaron un 17 durante el primer trimestre de este año, las europeas se desplomaron un 34 por ciento. Además, admitió que las ayudas emitidas desde Bruselas para compensar estas pérdidas son insuficientes.

También habló sobre Grecia y defendió que tiene la obligación de pagar sus deudas y ajustar su gasto, «las pensiones suponen un 16 por ciento del PIB». En el caso de que no «pongan orden se optará por la opción menos mala, que se vayan».

Agramunt criticó la actitud victimista de empresarios y políticos por exigir continuamente nuevas infraestructuras. «Las importantes están prácticamente hechas, otra cosa es que estén pagadas».