Anuncian expropiaciones falsas en Benimaclet y Campanar

Los concejales Vilar y Menguzzato denuncian ante la Policía la falsificación de cartas del Ayuntamiento de Valencia anunciando la expropiación de viviendas

Una broma de mal gusto o un intento de boicot a la visita que ayer organizaron los concejales Vicent Sarrià y Neus Fabregas a los barrios de Benimaclet y Campanar.

El pasado jueves aparecieron en más de una decena de portales de los barrios de Benimaclet y Campanar unos avisos en los que se advertía de la inmediata expropiación de las viviendas en virtud de un supuesto proyecto de recuperación de la huerta.

Dicha circular dirigida alas comunidades de vecinos apareció pegada en las puertas de los patios o en las de los ascensores y contenía toda una serie de incoherencias como juntar la firma del concejal Vilar con el cuño de la vicepresidencia de la Generalitat. O el membrete del Ministerio de Vivienda, que ya no existe como tal.

Una serie de errores, fácilmente desentrañables para cualquier persona relacionada con la Administración, pero que sembraron la alarma, e incluso la desesperación, entre multitud de vecinos de la zona que llamaron al Ayuntamiento alarmados por la creencia de que les iban a expropiar sus viviendas.

La burda falsificación llevaba el membrete del «Ministerio de la Vivienda» y cuño de salida del Departamento de Expropiaciones.

Rezaba que «el predio de su propiedad ha sido afectado por un proyecto que se encargará de la recuperación y reconstrucción del patrimonio agrícola de los territorios de la huerta (...) de conformidad con la Ley de Expropiación Inmobiliaria Forzosa... que facilita la adquisición, expropiación y posesión de bienes inmuebles para obras de infraestructuras y declarada de utilidad pública».

Además, la carta venía firmada por Ramón Vilar, pero con un cuño de la Vicepresidencia y la rúbrica de la concejala Anaïs Menguzzato, todo un compendio de incoherencias.

Fuentes policiales consultadas por los agentes explicaron que la falsificación podía ser tan burda para, precisamente, esquivar el delito de falsedad documental al ser de todo punto evidente que no podía ser auténtica.

Pese a todas esas evidencias de su falsedad, el grupo socialista del Ayuntamiento de Valencia recibió ayer decenas de llamadas de ciudadanos asustados preguntando por el concejal firmante. La Policía sigue investigando la autoría.

No existe ni proyecto ni intención

Habida cuenta de la radicalidad de algunas de las medidas que desde el Ayuntamiento de Valencia impulsan los grupos Compromís y -menos-, Podemos; los concejales socialistas hicieron ayer hincapié en que la medida anunciada en la carta falsificada no era real y que no existía ningún proyecto que tuviera algo que ver con ella.