Bankia fuerza al Consell a aceptar la venta del Valencia CF como única vía

Al Gobierno valenciano no se le acaban las preocupaciones. Mientras atraviesan el duro trance de tener que liquidar la radio y televisión pública valencianas, se ha visto en la necesidad de acordar con Bankia la venta del principal club futbolístico de la Comunitat, el Valencia CF, ante la certeza prácticamente absoluta de que la Fundación no se va a poder hacer cargo de la deuda de casi 90 millones de euros que mantiene con la entidad.

Los planes de refinanciación que habían presentado el presidente de la Fundación, Aurelio Martínez, y el del club, Amadeo Salvo, no habían convencido en absoluto al presidente del banco, José Ignacio Goirigolzarri. Éste se lo hizo saber al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, recordándole que si la Fundación no se hacía cargo de la deuda, el aval -si un juez no dice lo contrario- recae en este momento sobre la Generalitat, que se tendría que hacer cargo de la deuda.

Un pago de 90 millones de euros (de los cuales había que pagar 40 de una sola vez este año que viene) por un aval a una empresa privada, es lo último que necesita el Consell en este momento, cuando acaba de cerrar RTVV por falta de presupuesto y tiene la lupa del Ministerio de Hacienda sobre sus cuentas para asegurarse de que cumplen con el déficit.

Según las fuentes consultadas por La Razón, el presidente de la Generalitat pidió incluso al ministro de Economía, Luis de Guindos, que intercedería ante el vasco para conseguir que no ejecutara el aval. Finalmente, Goirigolzarri, que se caracteriza por ser exquisito en el trato, pero banquero al fin y al cabo, accede a no obligar al Consell a pagar esa cantidad, pero advierte de que la única opción posible entonces es la venta del club, pese a quien pese.

Fabra finalmente acepta, cualquier cosa antes que sacrificar más dinero público. Ante el comunicado emitido el pasado martes por la entidad, en el que instaba a buscar financiación, diversas fuentes apuntan que Bankia podría tener ya apalabrada la venta del equipo. De lo contrario no habría realizado dichas declaraciones.

En la otra parte se sitúan Martínez y Salvo, o más bien este último, puesto que, mientras que el ex presidente del Instituto de Crédito Oficial y de Loterías del Estado, ha ido de la mano de Bankia en la búsqueda de un comprador, Salvo se opone a vender el equipo. Pero lo bien cierto es que si Bankia ejecuta y reclama su dinero, poco pesará la opinión del presidente.

Hay una cosa en la que coinciden todas las partes. El asunto se resolverá antes del 31 de diciembre, por una cuestión de cierres de balance, tanto de la entidad financiera como de las cuentas públicas. No puede quedar ningún agujero por tapar.