Castellón se ilumina para despedir la Magdalena

La capital de la Plana celebra el fin de sus fiestas con espectáculos de luz, fuego y danzas tradicionales en una Plaza Mayor a rebosar

Las Fiestas de Castellón llegaron a su fin el domingo con el tradicional acto del Magdalena Vítol dedicado a las gaiatas, a la luz y al fuego característicos de la celebración de la fundación de la ciudad que se ha prolongado durante ocho días.

Con la Plaza Mayor llena de gente, las comisiones de las 19 gaiatas de la ciudad fueron llegando entre bailes y muestras de alegría hasta la puerta del Ayuntamiento de Castellón. Allí les recibieron la alcaldesa de la ciudad, Amparo Marco; el vicealcalde, Enric Nomdedéu, y la concejala de Fiestas, Sara Usó. El espectáculo, a cargo de la compañía castellonense Xarxa Teatre, supone cada año el punto y seguido de las fiestas.

Entre las gaiatas también llegaron las bandas participantes en el Festival de Animación y Música de la Magdalena (FAMM!), una de las novedades de estas fiestas que llenaron las calles de la ciudad de música y teatro de calle proveniente de medio mundo.

Durante casi una hora, el ambiente festivo inundó el centro de la capital de La Plana hasta la llegada de las reinas de las fiestas, Lola Marco y Carolina Tárrega, que fueron recibidas por la alcaldesa con un caluroso abrazo.

Más tarde y de la mano de la pirotecnia Martí de Burriana, las reinas prendieron la mecha de la Gran Traca Final, que partiendo del balcón del Consistorio recorrió las calles del centro histórico de la ciudad para regresar de nuevo a la Plaza Mayor y marcar el inicio del espectáculo piromusical. Cinco minutos antes de las 23.00 horas, dos actores se descolgaron de la fachada del Ayuntamiento hasta el balcón ocupado por las reinas, momento en el que estas pronunciaron el tradicional grito: «¡Magdalena!», que fue contestado por todos los presentes con: «¡Vítol!».

A continuación, la luz y la música tomaron la plaza y cuatro figuras hinchables abstractas se movieron por encima de los asistentes. Tras las figuras, un dúo de acróbatas bailaron en un arco junto al Fadrí y al concluir, cuatro parejas vestidas de blanco con indumentaria castellonense comenzaron a bailar la tradicional «dansà» sobre unas plataformas junto a la fuente.

Los fuegos se proyectaban desde la Concatedral de Santa María y se inició un homenaje a las gaiatas. Imágenes de los monumentos de luz se sucedieron y tras ellas, los «dimonis» dispararon sus antorchas de fuego. El acto finalizó con la pirotecnia y con las fotos de las reinas proyectadas.