Arte, Cultura y Espectáculos

Cuerpo y ciudad en el IVAM

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, inauguró ayer la Sala Permanente de Miquel Navarro
El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, inauguró ayer la Sala Permanente de Miquel Navarrolarazon

El Instituto Valenciano de la Moderniadad (IVAM) demostró que es uno de los centros de referencia de la obra de Miquel Navarro con la inauguración ayer de la Sala Permanente dedicada al artista valenciano. En ella, los visitantes podrán contemplar una amplia selección de obras fechadas entre 1964 y 2004 procedentes del extraordinario fondo del museo.

La muestra incluye sus tempranos dibujos y pinturas, esculturas de pequeño y gran formato, y cuatro de sus instalaciones en las que el artista reinterpreta el tema de la ciudad. Además, subraya aquellos ámbitos de investigación que mejor han definido el trabajo de Navarro durante más de cuarenta años: el cuerpo humano y su relación con la arquitectura, el deseo como motor de la creatividad y la construcción de la ciudad. Tal y como explicó el propio artista, la conciencia y configuración de su deseo es evidente con el tema de la ciudad como cuerpo humano. «Más que una ciudad ideal, en mi obra construyo una ciudad metafórica, llena de símbolos y significados».

En su estatutaria asistimos a una auténtica simbiosis del cuerpo con la arquitectura. Los guerreros, símbolos fálicos y tótems de Miquel Navarro se transforman en puentes y fuentes. Sus inconfundibles agrupamientos urbanos constituyen el prototipo de instalación más complejo y característico de su obra, y por ello, ocupan los espacios más destacados del recorrido expositivo. En ellos advertimos una especie de cubismo cronológico donde la antigüedad y modernidad se funden gracias a la presencia de edificios, industria y naturaleza.

Miquel Navarro (Mislata, 1945) es uno de los artistas españoles de mayor proyección internacional. Se inició como pintor a principios de los años sesenta, pero fue a partir de la década de los ochenta cuando empezó a obtener importantes reconocimientos como escultor. En 1980 comenzó su actividad como diseñador de escenografías y como constructor de esculturas monumentales. La concesión del Premio Nacional de Artes Plásticas le consagró como uno de los máximos exponentes del arte contemporáneo.