CulturArts deja en el aire el despido del 40% de su plantilla

Puede haber esperanza para parte de los trabajadores públicos del sector cultural de la Comunitat, ya que, tras la configuración de CulturArts, el «holding» que aglutinará todas las empresas de la Generalitat con competencias en este ámbito, han visto pender de un hilo sus puestos de trabajo.

Y es que la anterior consellera de Cultura, Lola Johnson, calibró en un 40 por ciento la reestructuración de esta plantilla. Sin embargo, el recién nombrado director general del ente, Manuel Tomás, negó ayer este dato y no quiso confirmar sí será mayor o menor «hasta que no se configuren las estructuras del 'holding'».

Esta organización, hecha desde el diálogo con todos los sectores de la cultura valenciana, se hará pública en unas dos semanas y, en ella, se establecerán de manera definitiva las unidades en las que se dividirán.

En esta línea, aseguró que se regirá bajo cinco apartados -no seis como había anunciado en su momento la propia Johnson-, al frente de las cuáles estará un subdirector general, con el sueldo correspondiente por acceder a este puesto de responsabilidad.

Nada de altos cargos, a excepción de él, que ya cuenta con un adjunto, José Luis Moreno, quien prestaba servicios en el Instituto Valenciano de la Cinematografía (IVAC).

Lo que sí está claro, en palabras de Tomás, es que se contará con los «más útiles», siempre atendiendo a criterios de racionalidad y contención del gasto y se hará bajo criterios de «ética, democracia y responsabilidad».

Si algo quiso dejar claro es que la cultura no entiende de ideologías. Por ello, las turbulencias por las que ha pasado el sector en los últimos tiempos por ciertas desavenencias con los administradores públicos ha quedado atrás. «La cultura es para los valencianos», aseveró tras contar que establecerá iniciativas de patrocinio y mecenazgo con empresas privadas.

Finalmente, Tomás, también músico de profesión, concluyó afirmando que a este proyecto le va a poner compromiso, pasión, trabajo y voluntad de contar con todos los individuos, ya sean asociaciones o particulares, «siempre partiendo del diálogo».