El Consell cambia de opinión y estudia mantener las aperturas en festivos

El 28 de julio el conseller de Economía, Rafael Climent, aseguró tras reunirse con la Unió Gremial y Plataforma del Comercio Valenciano, que su Departamento está «del lado de los pequeños comerciantes». Su director general de Comercio, Natxo Costa, fue mucho más claro y aseguró que su intención es «deshacer» la liberalización comercial que beneficia a las grandes superficies frente al pequeño comercio y limitar al máximo las aperturas en festivos.

Las declaraciones que el conseller realizó ayer mismo en referencia a este tema no tenían nada que ver. Climent aseguró que están abiertos al diálogo con todas las partes y que en la próxima reunión del Obervatorio de Comercio se abordará este asunto con los pequeños comerciantes y las grandes superficies para tener en cuenta las necesidades de cada sector. Un cambio que, aunque es de agradecer, no deja de resultar curioso.

El conseller mantuvo ayer una reunión con el director de Relaciones Externas de Consum, Javier Quiles, quien le informó sobre la actividad de esta cooperativa y sus planes de futuro, entre otros asuntos. Costa, quien también participó en el encuentro, explicó que escucharían los proyectos de la empresa para analizar en cuáles pueden colaborar.

Otro de los asuntos candentes que Climent tiene encima de la mesa -y quizás es uno de los más importantes- es la reestructuración de Feria Valencia. El cambio de Consell dejó paralizado un proceso que estaba prácticamente finalizado, y los nuevos dirigentes deben tomar las riendas del recinto ferial y decidir en qué dirección debe ir.

El conseller indicó ayer que tiene pendiente una reunión con el alcalde de la Valencia, Joan Ribó (presidente en el Patronato de Feria Valencia) y con el presidente de la institución, José Vicente González, para que estos le proporcionen toda la información necesaria en aras de tomar una decisión.

La idea que elaboró el anterior Consell pasaba por dividir Feria Valencia en dos sociedades distintas. Una pública, que se haría cargo de la deuda y del patrimonio (suelo y recinto), y otra privada, que se encargaría únicamente de la gestión comercial de la firma. Esta parte se sacaría a licitación.

Según explicó el propio González hace meses, cuando expuso a los actuales miembros del Consell el proyecto de Feria Valencia, se mostraron de acuerdo en dejar en manos públicas el patrimonio y la deuda, aunque no quedó clara su postura acerca de dejar en manos de una empresa privada y externa la comercialización de los certámenes.

En referencia a las competencias del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) y el Instituto Valenciano de la Competitividad Empresarial (Ivace), el conseller coincidió con la vicepresidenta, Mónica Oltra, al indicar que la situación es «heredada del Gobierno anterior».

«Estamos hablando Hacienda y Economía para resolverlo de la forma más adecuada, concretamente lo relativo a la financiación para la empresa privada, esperamos hacerlo más pronto que tarde», añadió el conseller, quien se mostró esperanzado en que la división definitiva de competencias esté aprobada en el próximo pleno del Consell.