Educación

El fracaso escolar cae un 2,3 por ciento en los últimos tres cursos

El Consell defiende la desmasificación de las aulas y la reducción de barracones

VALENCIA– En los últimos tres cursos se ha reducido en un 2,3 por ciento el fracaso escolar de los estudiantes de la Comunitat Valenciana. Así lo confirmó ayer el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, tras presidir el acto de inicio del curso de Educación Infantil y Primaria en el nuevo CEIP Benadressa en Castellón. Este colegio es, junto con el de Gandía y el de Denia, uno de los tres que estrenan instalaciones.

Tras una inversión de más de tres millones y medio de euros, los alumnos de este centro abandonaron los barracones que ocupaban desde el año 2008. En línea con la reducción de estas aulas, Fabra anunció que 2013 cerrará con un 35 por ciento menos de aulas prefabricadas que hace dos años. Mientras que el Consell defiende la disminución de barracones, desde la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAPA-Valencia) denunciaron que cerca de 20.000 alumnos iniciaron sus jornadas lectivas en 800 casetas.

En total, 436.524 alumnos empezaron ayer las clases, lo que supone un 0,85 por ciento menos de escolares durante este curso respecto al pasado. Así, la ratio de alumno por aula se sitúa en casi diez niños menos del máximo permitido, que es de 30.

Unas clases menos masificadas y la reducción de barracones son las dos bazas de la Generalitat ante las críticas por los recortes lanzadas por padres, profesorado, sindicatos y partidos de la oposición. Miembros de la Plataforma en Defensa de la Educación Pública se concentraron en la puerta de un colegio del barrio valenciano de El Cabanyal en protesta por los recortes en educación y para recalcar el prestigio de la escuela pública.

La disminución y el impago de las ayudas a las becas para libros fueron otra de las grandes reivindicaciones de estos colectivos. Por su parte, FAPA-Valencia denunció que estas ayudas bajaron un 84 por ciento en los últimos tres años y pasaron de más de 42 millones a siete millones de euros. Además, la presidenta de la organización, Eva Grimaltos, recalcó que no se trata de una reducción de presupuesto, sino de una «supresión de las ayudas» ya que estas aún no se han convocado.

Así, pese a que según esta entidad la Generalitat abonó «recientemente» once millones de euros a padres de alumnos de secundaria en concepto de ayudas para libros de 2011- 2012, Grimaltos matizó que la cantidad «no asciende ni a la mitad» del total de la deuda y aseguró que continuarán reclamando este pago.

El PSPV y EUPV también se sumaron a esta reivindicación y exigieron recuperar las becas para libros de texto, así como para transporte escolar y comedor. El vicesecretario general de Educación e Integración Social del PSPV, Miguel Soler, reclamó que se modifiquen las ayudas de comedor y transporte, «uniéndolas como se hacía hasta el curso pasado».

El inicio de la actividad en los colegios, además de con menos ayudas, también empezó, según el sindicato CSI·F, con menos profesorado y con plazas sin cubrir. Las reducciones de jornada solicitadas por docentes titulares o las sustituciones son algunas de las vacantes que tal y como asevera esta organización no ofertó la Conselleria de Educación.

Tabletas: una novedad educativa polémica

El curso arranca con un nuevo proyecto piloto: usar las tabletas en las aulas. Mil alumnos de quinto de Primaria de 24 centros estudiarán con estos dispositivos electrónicos. Desde FAPA defendieron ayer la inclusión de las TIC en los colegios, sin embargo se mostraron preocupados ante la falta de una partida específica en los presupuestos y por la posible discriminación que generaría en caso de no garantizar a todos los niños el acceso a la tecnología necesaria. El Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunitat advirtió de el uso diario de tabletas está provocando un incremento del número de estudiantes con problemas visuales.