Universidad

El gasto en investigación crece un 33 por ciento en cinco años

Pese a la crisis, las Universidades han podido contratar a 115 investigadores desde 2008. Se han financiado 1.748 proyectos

La Conselleria de Educación, Cultura y Deporte va a intentar mantener el esfuerzo inversor en investigación, que se ha aumentado un 33 por ciento desde 2008
La Conselleria de Educación, Cultura y Deporte va a intentar mantener el esfuerzo inversor en investigación, que se ha aumentado un 33 por ciento desde 2008larazon

La crisis ha sido un mazazo para la I+D+i que se desarrolla en las Universidades valencianas. La falta de recursos públicos y la poca iniciativa privada han provocado que el panorama investigador valenciano se encuentre en «stand by».

Asimismo, los rectores de las Facultades de la Comunitat han dado la voz de alarma asegurando que el presupuesto del Ministerio de Educación para este ámbito en 2013 desciende en más de un 80 por ciento, lo que pondrá en peligro, sobre todo a largo plazo, seguir investigando.

Sin embargo, desde la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte van a intentar mantener el esfuerzo inversor en investigación, que se ha aumentado un 33 por ciento desde 2008.

En concreto, durante este periodo, se han concedido más de 104 millones de euros a través de la Orden Única de I+D con la que se financian los programas Prometeo, Santiago Grisolía, Gerónimo Corteza y Vali+d.

Con ella, se han subvencionado más de 1.748 proyectos de investigación y se ha posibilitado la contratación de un total de 115 trabajadores.

Aunque con respecto al año 2011 ha descendido un diez por ciento la inversión, pasando de 39,38 millones el año pasado a 35,87 en 2012, la idea de Educación es seguir manteniendo estas cifras en los próximos años.

Este presupuesto está dentro de esa Orden única que tiene como finalidad poder dotar de ayudas y becas al personal investigador, reforzar las políticas de calidad en la investigación y potenciar los proyectos de especial relevancia entre grupos I+D+i.

Además, contempla todas las subvenciones y becas a las que pueden concurrir los grupos científicos, que dependen de sus méritos en el sector.

Uno de los aspectos que más se impulsa mediante estas ayudas es la transferencia de conocimiento a la empresa. Por ello, los cuatro programas en los que se invierte sirven para internacionalizar lo que se investiga en la región y que sea referente en la creación de nuevos proyectos.

Por otra parte, tal y como ya avanzó LA RAZÓN, el Departamento que dirige María José Catalá exigirá a los investigadores que demuestren el beneficio social de sus proyectos para recibir financiación pública. Esto no quiere decir que estos programas tengan que aportar, sí o sí, un valor económico. Muchos experimentos no obtienen beneficios concretos pero sirven para demostrar o desechar hipótesis. Sin embargo, los científicos que quieran recibir dinero tendrán que redactar informes que pongan de relieve que el dinero que la Administración ha inyectado no ha caído en saco roto.

Finalmente, aunque se mantiene la inversión, Educación buscará financiación de empresas valencianas para ciertos másteres universitarios relacionados con el ámbito científico, que tengan, a su vez, un retorno para las empresas. El objetivo es buscar implicación de todos los sectores, siempre con el apoyo de la Administración.