El optimismo llega a la empresa familiar valenciana

La mejora de la situación económica va calando en el ánimo y en los números de las empresas valencianas. En concreto, las compañías de carácter familiar son mucho más optimistas respecto a su situación presente y futura que hace unos meses. El 74 por ciento cree que la evolución de su facturación durante los próximos seis meses será mejor o mucho mejor; el 59 por ciento mejorará sus inversiones y el 92 por ciento cree que la evolución de su plantilla será igual o mejorará. Esto hace que el 61 por ciento considere que mejorará su capacidad productiva.

Así se desprende del barómetro sobre confianza empresarial entre este tipo de sociedades, realizado por la consultora Océanos Azules a petición de la Cámara de Comercio de Valencia. De este estudio se desprende también, como dato negativo, que el 67 por ciento de estas empresas cree que no variará la situación de las deudas con las administraciones públicas, un once por ciento considera que evolucionará favorablemente y un 22 por ciento que empeorará.

En otro orden de cosas, desciende el número de empresas que prevé hacer desinversiones (ventas de activos) en los próximos seis meses, aunque también bajan las que esperan realizar inversiones (en actividad principal; otras actividades y/o internacionalización) en ese mismo plazo.

Destaca el estancamiento de la situación de cobro de las deudas con las administraciones públicas, que no mejora ni la situación en los últimos 12 meses ni la expectativa de cobro a un año.

Percepción de la situación

Respecto a la gestión de la empresa familiar, aproximadamente un tercio de las firmas encuestadas tiene previsto iniciar actividades vinculadas a la gestión propia de la empresa en los próximos seis meses, mientras que dos tercios aproximadamente continúa sin tener protocolo familiar.

La estructura de gobierno y dirección de la empresa deja ser la principal preocupación en el ámbito de estas empresas. Para el 39 por ciento de las encuestadas, el factor que más les preocupa es la fiscalidad. Al igual que en el barómetro de enero, la planificación de la sucesión continúa siendo la principal preocupación para el 18 por ciento de las empresas.

Uno de los principales síntomas de que la recuperación económica está arrancando es que el 77 por ciento de las empresas afirma tener baja o muy baja dificultad para acceder a financiación de circulante o inversión (un porcentaje similar a enero 2015).

En los últimos doce meses, el 52 por ciento afirma que la evolución de su facturación ha sido mejor o mucho mejor; el 61 por ciento ha mejorado su capacidad productiva, y el 67 por ciento declara que la evolución de las inversiones realizadas ha sido mejor o mucho mejor. Sin embargo, en el mismo periodo, la evolución de las deudas con las administraciones públicas se ha mantenido igual para un 61 por ciento, ha mejorado para un 23 por ciento y ha empeorado para un 16 por ciento.

A un año vista, el 97 por ciento opina que la situación de su empresa será mejor o mucho mejor; esta misma opinión respecto a su sector de actividad la tiene el ocho por ciento.

Por encima del resto de propuestas, la reducción de la presión fiscal sigue siendo la principal demanda para el 29 por ciento de las empresas. El cumplimiento de las condiciones de pago se convierte en la primera demanda para el 12 por ciento.

El Instituto Valenciano de la Empresa Familiar (Ivefa) es una asociación empresarial de la Comunitat que tiene como objetivo la defensa y el apoyo a la Empresa Familiar Valenciana y que actúa como portavoz de estas compañías, ayudando a las familias empresarias a solventar problemas como la transmisión empresarial entre generaciones, uno de los principales retos que deben abordar estas firmas.