Política

Valencia

El PP da por muerto el Botànic y sus socios restañan las heridas

Mata (PSPV) insinúa que Estañ (Podemos) aceptó el adelanto electoral que ahora no ve justificado políticamente y que califica de tacticismo

Los síndicos del Botànic, Manuel Mata, Fran Ferri y Antonio Estañ conversan antes de la Junta de Síndics, mientras el expresidente Lizondo parece contemplarles
Los síndicos del Botànic, Manuel Mata, Fran Ferri y Antonio Estañ conversan antes de la Junta de Síndics, mientras el expresidente Lizondo parece contemplarleslarazon

Mata (PSPV) insinúa que Estañ (Podemos) aceptó el adelanto electoral que ahora no ve justificado políticamente y que califica de tacticismo

Les Corts Valencianes reunió ayer a su Junta de Síndic para conocer y dar luz verde al decreto de disolución del Parlamento que se hizo efectivo ayer. A partir de ese momento, solo queda en vigor la denominada Diputación Permanente.

Los grupos parlamentarios aprovecharon la conferencia de prensa posterior para comenzar a lanzar sus mensajes en clara dialéctica electoral.

Así, mientras el PP consideró que «el Botànic está muerto», Ciudadanos negó la posibilidad de pactar con el PSC valenciano, en alusión al PSPV.

Mientras tanto, los socios del Botànic trataron de quitar hierro al grave desencuentro ocurrido el lunes cuando el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, decidió adelantar las elecciones en contra del criterio de su socio de gobierno de Compromís.

Podemos, que según dijo su síndico Estañ, se enteró por los medios de comunicación del adelanto, dijo que no compartía que hubiera razones políticas, y que el adelanto solo respondía al tacticismo en clave de partido. Y criticó que «la escenificación de ayer no ayuda» a reeditar el pacto del Botànic.

Estañ dijo que pedirá una reunión con los consellers para tratar de impulsar las leyes que se han quedado pendientes de aprobación, varias de las cuales han sido impulsadas por la formación morada. Fue cauto a la hora de enunciar el decreto ley como la forma de sacar adelante dichos textos legales, y dijo que no era la mejor fórmula, aunque no la descartó al ciento por ciento. Estañ calificó la legislatura de «exitosa con limitaciones».

El síndico de Compromís, Fran Ferri, trató de ser más positivo y dijo que el hecho de que el presidente «haya decidido unilateralmente adelantar las elecciones, no hace imposible reeditar el Botànic». Pero sí reconoció que la actitud del presidente Puig con el adelanto electoral había sido desleal.

Respecto a la reunión del Consell propuesta por Podemos, dijo que «no me casa que pidan ahora sacar unas leyes que se podrían haber aprobado en el pleno ordinario si no hubiera habido adelanto electoral».

En este escenario, la portavoz adjunta del PP, María José Catalá, ironizó con la crisis vivida en el Botànic y dijo que «en este botánico hay árboles de distinto porte y también hay matorral». Añadió que «en este teatro, la cosa solo podía acabar en drama» y calificó los intentos de Podemos por aprobar sus leyes en estos dos meses como «melancolía».

Manolo Mata (PSPV) calificó a sus diputados de «gladiadores» y no dejó el lirismo en toda su intervención. Así, se refirió al síndico de Compromís, Fran Ferri como «mi hermano, mi amigo, mi socio» y lamentó la marcha de los diputados de Podemos Montiel, Meco y Jiménez. Incluso dijo de Bonig (PP) que era una mujer de palabra. A quien dejó en mal lugar fue a Estañ porque desveló que ante Puig había avalado el adelanto electoral.