La Comunitat, la tercera en la que más crece el empleo público, un 13,8 por ciento

En el sector privado la contratación ha crecido solamente un 0,1 por ciento

El número de ocupados en la Comunitat Valenciana ha aumentado en los últimos doce meses en 45.600 personas, un 2,3 por ciento. Pero este aumento del empleo tiene matices. Ocho de cada diez nuevos empleos han sido por cuenta ajena. Concretamente, el número de asalariados ha tenido un incremento anual de 36.100 personas (un 2,2 por ciento más), al tiempo que el de autónomos han crecido en 11.300 personas, un 3,3 por ciento.

Lo curioso es que entre los asalariados valencianos, casi todas las contrataciones se han producido en el sector público, concretamente, los contratos en este sector han crecido en 35.200 personas, siendo el tercer incremento más importante de entre todas las autonomías.

Por su parte, el incremento del empleo privado, que ha sido únicamente del 0,1 por ciento, es más débil que la media nacional, que se sitúa en el 3,3 por ciento, pero el incremento en el empleo público se sitúa muy por encima de la media.

Estos datos se desprenden de un exhaustivo informe realizado por la consultora profesional Adecco, en el cual se refleja que de los 2,06 millones de ocupados valencianos, 1,7 millones son asalariados y 353.900 autónomos. A su vez, los trabajadores por cuenta ajena se dividen en 1,4 millones de asalariados en el sector privado y 290.200 en el público. Por su parte, los no asalariados pueden desagregarse en 201.500 autónomos, 139.700 empleadores y 12.700 personas en otras situaciones.

El peso del empleo asalariado dentro de la ocupación total en la Comunitat Valenciana es ahora de un 82,8 por ciento, algo más bajo que el 84,2 por ciento de media que hay en toda España. Sin embargo, en comparación con los datos de 2008, el peso de los asalariados se ha incrementado 1 punto porcentual gracias, sobre todo, al incremento del empleo público.

En la Comunitat Valenciana, la participación en el empleo de los asalariados privados es de un 68,7 por ciento, 1,5 puntos porcentuales más baja que en 2008. Pese a ello, exhibe una proporción mayor al promedio de España (67,9 por ciento).