Economía
Los expertos preven una mejora de la economía por primera vez desde 2007
Siguen los buenos datos para la economía valenciana. Aunque no hay que echar las campanas al vuelo, los indicadores son positivos y los propios expertos vaticinan una clara mejoría para los próximos meses. Por primera vez desde el año 2007 los economistas de la Comunitat Valenciana, en su encuesta semestral, creen que la economía regional mejorará en los próximos seis meses.
El presidente del Colegio de Economistas de Valencia, Juan Manuel Pérez, aseguró ayer que aunque todavía no se puede hablar de una recuperación económica, sí parece que la recesión haya tocado fin y comienza una etapa con tasas de crecimiento positivas.
No obstante, la mayoría de los encuestados piensa que la economía de la Comunitat seguirá estando peor que la española.
En cuanto al principal problemas de la región, el 85 por ciento cree que es, sin duda alguna, el desempleo, seguido por el estancamiento de la demanda interna y la reducida dimensión de las empresas.
No figura entre sus preocupaciones la deuda pública, algo que se debe, según explicó Pérez, a que se percibe que el sector público está ya reajustándose, lo que, junto con el descenso de la prima de riesgo, conduce a pensar en una reducción de este endeudamiento.
Además, los economistas consideran que es necesario aumentar la atracción de empresas extranjeras, para lo cual, según los encuestados, es imprescindible mejorar las condiciones de acceso a la financiación, así como la transparencia en el gasto público y el aumento de la lucha contra la corrupción y el fraude.
Con respecto a esta última cuestión, los presidentes de los Colegios de Valencia y Castellón -este último Jaime Querol- coincidieron en señalar que es necesaria la «ética y ejemplaridad en todos los aspectos de la sociedad».
«No podemos estar pidiendo esfuerzos a los ciudadanos y a las empresas, conviviendo con fenómenos de corrupción y de fraude», manifestó el presidente del Colegio valenciano, mientras que el de Alicante, Francisco Menargues, afirmó que la lucha contra la corrupción y el fraude se entiende como una actuación prioritaria.
Para mejorar la competitividad empresarial, optan por la inversión en innovación e investigación, aumentar la presencia en mercados exteriores, invertir en formación y cualificación del capital humano e involucrar a la plantilla en la producción.
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