Los expertos ya advirtieron, «no hay solución»

Valencia- Que Santiago Calatrava no es un arquitecto demasiado apoyado entre el sector no es ninguna novedad. Sin embargo, las advertencias que realizaron cuando se produjeron los primeros desperfectos estaban lejos de ser críticas sin fundamento. Los expertos consultados por LA RAZÓN ya advirtieron el pasado mes de febrero de que el problema se agravaría con el paso del tiempo, puesto que se ha creado un espacio entre el «trencadís» y la capa de acero donde se han producido microfisuras. Por ellas ha ido pasando el agua, lo que ha acelerado el proceso de deterioro.

Era el gerente de Bipolaire Arquitectura, Miguel Arraiz, y vocal de Tecnimed, asociación que agrupa a ingenieros, consultores y arquitectos valencianos, el que ponía voz a lo que era un clamor entre el sector. No hay solución para reparar la cúpula de Les Arts. Es necesario arrancar todo el revestimiento de azulejos.

Explicó que es imposible reparar solo las partes dañadas, ya que se colocaron en una única pieza. Para evitar que se vuelva a producir este problema recomiendan que se pongan juntas de dilatación, aunque alertan de que si el «trencadís» se vuelve a superponer sobre la estructura de metal, el problema se repetirá.

Arraiz incidió en que cuando los arquitectos vieron la técnica que Calatrava empleaba pensaron que habría utilizado un «mortero de agarre» que conseguiría lo que nadie había logrado hasta ahora, pero no fue así. Calatrava experimentó con Les Arts y falló.

En estos meses la Generalitat ha confiado en el informe de los técnicos que aseguraban que no había riesgo de desprendimiento. Así lo publicó este diario el pasado 29 de marzo. Creían que el peligro era puramente estético y que no se arriesgaba la seguridad de las personas. También se equivocaron y nueve meses después, el Palau de les Arts ha quedado cerrado al público.