Vivienda

Si es fumador, no encontrará compañero de piso en Valencia

Sólo el 2 por ciento de los que buscan compartir casa quieren vivir con fumadores

La crisis ha aumentado el número de personas que buscan compartir piso
La crisis ha aumentado el número de personas que buscan compartir pisolarazon

El alto precio de la vivienda, las dificultades para alcanzar la independencia, el desempleo o tener un salario bajo ha propiciado que, cada vez más, no sólo sean los estudiantes los que busquen compañeros de piso.

El alto precio de la vivienda, las dificultades para alcanzar la independencia, el desempleo o tener un salario bajo ha propiciado que, cada vez más, no sólo sean los estudiantes los que busquen compañeros de piso. Tal y como publicó LA RAZÓN hace unas semanas, ha aumentado considerablemente el número de trabajadores y profesionales, no sólo universitarios, que se reparten las habitaciones de una misma casa para convivir.

No obstante, esta búsqueda tiene sus inconvenientes. Y es que encontrar compañeros con los que la convivencia no se haga cuesta arriba es muy complicado. Más cuando, como se dice vulgarmente, cada uno es «de su padre y de su madre». En el caso de los valencianos hay un factor clave: el tabaco. Solamente un dos por ciento de los que buscan compañeros de piso prefiere vivir con fumadores. Pero además, en Valencia sólo el 2,5 por ciento de los que ofrecen habitaciones tolera convivir con ceniceros llenos de colillas y olor a humo.

La capital del Turia es la cuarta ciudad con más fumadores ofreciendo o buscando habitación para compartir. Según el portal de alquiler de habitaciones «Easypiso.com», la prohibición de fumar en los pisos compartidos es algo cada vez más común. Entre los usuarios que restringen la búsqueda de nuevo compañero señalando la casilla de fumadores o no fumadores, sólo dos de cada cien indica que los prefiere fumadores, mientras que 98 prefiere que sea no fumador.

Asimismo, los valencianos son cada vez más conscientes de los riesgos que supone convivir con este vicio, tanto de manera activa como pasiva. Las campañas de sensibilización sobre los riesgos que conlleva ser fumador pasivo, sumado a los cambios de hábitos en los lugares públicos donde encenderse un pitillo ya no está permitido, han provocado que los inquilinos sean más estrictos a la hora de permitir el humo en casa y por ello, seleccionan compañeros de piso no fumadores.

De los usuarios que seleccionan la casilla de «fumador» o «no fumador», además de las de «prefiere fumador» o «prefiere no fumador» se observa que, en las principales ciudades, la gran mayoría es más prohibitiva a la hora de no dejar fumar en casa.

Las ciudades en las cuales hay más usuarios fumadores ofertando habitaciones en alquiler son, en orden decreciente: Barcelona, Madrid, Sevilla, Valencia y Palma de Mallorca. Estas ciudades figuran entre las que cuentan con más oferta en alquiler.