Campus Puerta de Toledo

madrid- El mercado de Puerta de Toledo por fin avanza para ser algo «grande». Y lo hace de la mejor forma posible: a través de la Educación. A comienzos del año 2011, la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) apostó fuerte por este enclave de la capital para su expansión. Firmó un convenio con el Ayuntamiento de la capital, propietario del terreno, y con el Gobierno regional. En la mente de todas las partes implicadas, el objetivo de transformar este antiguo mercado de pescados en un auténtico «centro de excelencia universitaria» a cambio del pago de un canon.

Según el convenio, la Carlos III comenzaría a pagar en 2012 una cantidad de 25.000 euros anuales durante los tres primeros años, que aumentaría hasta los 75.000 y, finalmente, hasta los 100.000 euros a partir del año 17. En total, se trata de un alquiler de 3,96 millones de euros en los próximos 50 años bajo la modalidad de una concesión administrativa.

El edificio, que cuenta con cuatro plantas y una superficie total de más de 20.000 metros cuadrados, ha sufrido innumerables remodelaciones en toda su historia. Los comerciantes que permanecen en el Mercado –en torno a una veintena de comercios cuyos contratos expiran en 2016– coinciden en que ninguno de los usos que se han intentado potenciar en el recinto ha llegado a tener éxito. Así parecen acreditarlo los más de 90 comercios que han echado el cierre en los últimos años. Los supervivientes, sin embargo, sí auguran un futuro prometedor a su aventura universitaria: «Nos parece una idea estupenda; ojalá salga adelante», aseguró uno de los comerciantes.

Este proyecto, del que se pretende que alcance su pleno rendimiento en el medio plazo, ha echado a andar en el presente curso. Alrededor de 250 alumnos estrenaron los nuevos aularios el pasado 24 de septiembre, convirtiéndose en la primera promoción de la nueva oferta de posgrado de la Universidad Carlos III, que estrena su cuarto campus en el centro de Madrid. La sede Madrid-Puerta de Toledo basa su modelo educativo en una oferta de posgrado orientada a un número reducido de estudiantes de alto nivel. Actualmente, se imparten en el antiguo mercado cuatro másteres: «Prevención de riesgos laborales», «Acceso al ejercicio de la abogacía», y los dos últimos, «Finance» y «Management», que son de carácter internacional, por lo que las clases se imparten en inglés. Recientemente se ha incorporado otra veintena de alumnos más para completar la segunda edición de los másteres.

Tanto desde la Comunidad como desde el consistorio se ha pretendido que el embrión del nuevo campus tenga ya la esencia de lo que se pretende que sea en unos años: «un referente» para la universidad en la región. Para conseguirlo, la Carlos III ya ha previsto para este año la realización de seminarios científicos internacionales y la ampliación de la oferta de másteres y de formación permanente. Todo ello orientado a configurar un centro internacional de estudiantes.

Fachada protegida

Aunque aún no se han podido adelantar detalles referidos a las obras de ampliación, la Universidad ha confirmado a este diario que «el objetivo es aumentar los aularios, y el resto de las instalaciones se llevará a cabo tan pronto como sea posible». También se pondrán en marcha actuaciones de rehabilitación, acondicionamiento y reestructuración puntual que no afecten al único elemento protegido de de restauración obligatoria, que es la fachada exterior del edificio.

El responsable de Comunicación de la Universidad, José María Martín Dávila, asegura que el término «centro de excelencia» es una expresión demasiado imprecisa a la hora de calcular cuántos alumnos y titulaciones de posuniversitarias tendrá finalmente el campus. Sin embargo, el objetivo es alcanzar un nivel óptimo de estudiantes que se adecúen a las características de unos estudios tan exigentes.

A partir de este momento, se espera que aterricen en el campus numerosos alumnos brillantes de distintos países como China, Estados Unidos y todas las naciones europeas. Al fin y al cabo, el Mercado de Puerta de Toledo tiene la oportunidad de convertirse en un punto de encuentro con estudiantes inmigrantes, lo que se traducirá en un salto de calidad a nivel de Educación en la Comunidad. Un ambiente cosmopolita en una situación propicia para estrechar lazos entre estudiantes: el centro de Madrid, una de las principales capitales europeas.