Carmena planta ahora a la Plataforma Antidesahucios

Se reunió ayer con los predidentes de BBVA y Santander, para presentarles su plan antidesalojos y pedirles un coordinador. Dice que su oficina servirá para que las PAH no tengan que ser quienes frenen los desahucios. Ellas responden: «No dejaremos de luchar»

Manuela Carmena volvió a meter ayer el dedo en la herida abierta de las Plataformas de Afectados por la Hipoteca. La nueva alcaldesa de Madrid puso de nuevo por delante a las entidades bancarias frente a los afectados por los desahucios al reunirse con los presidentes del BBVA y el Banco Santander, después de hacerlo con Bankia a principios de mes, y dejar para el lunes a las «víctimas».

Mantuvo dos reuniones, de las que apenas se dieron datos, aparte de que fue una primera «toma de contacto», acompañada por su número dos, la concejal de Equidad y Derechos Sociales, Marta Higueras, con el presidente del BBVA, Francisco González, y su homóloga del Banco Santander, Ana Patricia Botín, para presentarles, según un comunicado del Ayuntamiento de Madrid, sus iniciativas para frenar los desahucios y crear viviendas sociales.

Las reuniones sirvieron para encender aún más los ánimos de los antidesahucios, que ya venían «calentitos» desde el inicio de la semana. «Esperábamos que se hubiera reunido antes con los afectados que con los bancos», aseguraron ayer desde la PAH a LA RAZÓN. A los miembros de este movimiento, creado hace seis años por afectados de desahucios para negociar con los bancos aplazamientos, quitas, daciones en pago o alquileres sociales, les ha sorprendido que ellos sean «los últimos» en la lista de prioridades de Carmena, que fijó como objetivo prioritario al llegar a la Alcaldía la paralización de los desalojos. Y sobre todo que ayer dijera en la «Cadena Ser» que si no ha habido contacto antes con ellos ha sido porque en el consistorio estaban centrados en buscar alternativas con los bancos y no han tenido tiempo.«Ha tenido muchos días para llamarnos y hablar. Y así lo han hecho con los bancos. Muchos miembros de su equipo, como Nacho Murgui, nos conocen, tienen nuestros teléfonos y saben dónde nos reunimos. Hubiera sido muy facil una simple llamada», se quejan. Sin embargo, desde Ahora Madrid no se pusieron en contacto con ellos hasta hace unos días, cuando mostraron su malestar públicamente por cómo estaba llevando la alcaldesa el tema de los desahucios. Lo curioso es que su turno no llegará hasta el lunes y, en su caso, no será la alcaldesa quién les reciba, sino Higueras. «Pensamos que es bueno que los nuestros entren en las instituciones, pero lo que no puede ser es que las instituciones se apoderen de ellos», asegura un miembro de la PAH preguntado por si ha notado cambios en los concejales de Ahora Madrid desde que ocupan un sillón en el Palacio de Cibeles.

De la hermética reunión mantenida ayer entre Carmena y los presidentes del BBVA y del Santander sólo se supo que había sido «cordial» y que la regidora quiere que éstos designen a una figura que haga de coordinador para los desahucios y que colabore con la oficina que quiere crear para frenar los desalojos.

Desde la PAH ponen en duda todas estas medidas: «Los ayuntamientos no tienen competencias para parar un desahucio y eso ella lo sabe, porque son decisiones judiciales. Lo que sí puede hacer es exigir al Gobierno que cambie la Ley para crear segundas oportunidades a los afectados», aseguran. «También puede prometer que no habrá más desahucios en los pisos que son de propiedad municipal, pero eso no lo ha hecho», señalan.

Sobre los objetivos de la oficina antidesahucios de Carmena, la alcaldesa aseguró ayer en la «Cadena Ser» que están trabajando para que no tengan que ser las plataformas las que frenen los desalojos. Una medida que desde la PAH critican duramente: «Vamos a seguir luchando ya esté Carmena en Madrid o Colau en Barcelona, porque los desahucios los para la ciudadanía, haciendo presión social, y los afectados renegociando, no los políticos», sentencian. Recuerdan que ya en los 80 se perdieron muchas plataformas y asociaciones ciudadanas porque se suponía que el PSOE iba a abanderar sus causas. «Costó mucho recuperar el tejido asociativo y ahora no vamos a renunciar a él, porque es en quien confían los vecinos».

De hecho, el malestar de estas plataformas se debe no sólo a que Carmena haya antepuesto los bancos a los afectados, sino a que el Ayuntamiento de Madrid se arrogara el aplazamiento de un desahucio el martes; hecho que fue desmentido por la PAH, que aseguró que ningún concejal estuvo en la negociación con los bancos ni en la casa de Asun, la vecina para la que se consiguió un aplazamiento de tres semanas.

Zapata y Maestre: «Jóvenes airados»

En menos de una semana, Manuela Carmena ha tenido que hacer tres cambios en su Gobierno inicial para hacer frente a las polémicas protagonizadas por sus concejales. Los chistes sobre el Holocauto y sobre las víctimas de ETA del edil Guillermo Zapata y la imputación de su portavoz, Rita Maestre, han provocado en tiempo récord la primera crisis de la recién constituida Corporación Municipal. Sin embargo, ayer, la alcaldesa calificó a su equipo de «compañeros perfectos» ante la «enorme aventura» que es, en su opinión, hacer «política diferente» en el Ayuntamiento, y aseguró saber cuáles eran sus perfiles y, «sobre todo, su corazón y su inteligencia». Admitió que «quizá» tienen «algún pasado sobre los cuales les apetezca pedir perdón». Y justificó sus comentarios porque «fueron unos jóvenes airados» del 15-M.