Policía

Detenido el ladrón sexagenario del hacha

La Policía ha arrestado a un hombre de 68 años que asaltó un Ibercaja de Clara del Rey. Atacó el cajero automático, pero huyó sin llevarse nada.

El hombre trató de ocultar su imagen con una gorra y una bufanda tipo braga
El hombre trató de ocultar su imagen con una gorra y una bufanda tipo bragalarazon

La Policía ha arrestado a un hombre de 68 años que asaltó un Ibercaja de Clara del Rey. Atacó el cajero automático, pero huyó sin llevarse nada.

Una bufanda, una gorra y un hacha eran sus herramientas de «guerra». Se trata de un empresario jubilado de 68 años que ya ha sido detenido por la Policía Nacional por un presunto delito de robo con violencia e intimidación al intentar atracar con este arma blanca una sucursal bancaria en el distrito de Chamartín. Concretamente fue un Ibercaja situado en el número 66 de la calle Clara del Rey.

Según la Dirección General de la Policía, el arrestado, a quien se le imputa también un delito de daños y otro de falsedad documental, no tiene antecedentes penales y cambiaba cada dos o tres días de alojamiento en distintas localidades.

Los hechos se produjeron a mediados del mes de mayo cuando el sexagenario entró en el banco armado con el hacha en una mano y ataviado con una bufanda y una gorra para ocultar su identidad. Una vez dentro de la sucursal bancaria, el hombre no dudó de intimidar a todos con el arma, tanto a clientes como a todos los trabajadores que se encontraban en ese momento en el local.

Lejos de exigir que le dieran grandes cantidades de dinero, al hombre, casi septuagenario, no se le ocurrió otra cosa que golpear el cajero automático que había dentro del establecimiento bancario con su arma para extraer el botín que había en el interior del mismo. Sin embargo, sólo consiguió dañar e inutilizar el cajero automático, por lo que se le imputa el delito de daños. Además, tuvo que huir en un vehículo sin llevarse nada. Los investigadores descubrieron que el vehículo pertenecía a una empresa de alquiler y tenía una placa de matrícula con los números manipulados que impedía leer los verdaderos, lo que dificultó su detención.

Tras encontrar el hacha y la ropa con la que perpetró el robo, el hombre de 68 años pasó a disposición judicial.