Detenido un rumano por agredir sexualmente a su hija de dos años

MADRID- Dijo que ya lo sospechaba, que seguramente no era la primera vez que lo hacía pero esta vez lo tenía claro y «hasta aquí hemos llegado». Elena G., una mujer rumana de 34 años salió corriendo escaleras abajo con su hija en brazos tras el deplorable episodio. Intentando mantener la calma por la niña, llamó al 112 y los servicios de Emergencias derivaron la llamada. Eran las 23:52 horas y enseguida se personaron en la zona agentes de la Policía Local de Coslada. Allí, presa de la rabia, relató lo que acababa de suceder escasos minutos antes en un tercer piso de la plaza de los Comuneros. El horror más absoluto, sobre todo, porque se trataba de su propia hija, según fuentes policiales.

Elena mantenía una relación sentimental con Adrián G., también rumano, de 33 años, y juntos habían tenido a una niña que ahora tiene dos años. La mujer confesó ante la Policía que ya se había fijado en que su hija se quejaba al tocarla en sus partes íntimas cuando la bañaba pero, por el motivo que sea, no se decidió a actuar. La noche del domingo Elena se había metido en la ducha y fuera del baño se encontraba su pequeña. Al parecer, el padre de la criatura había subido borracho y, mientras la madre estaba ocupada, Adrián abusó sexualmente de la niña. Al salir del baño Elena se encontró a su hija llorando y se dio cuenta de lo que acababa de ocurir. Bajó corriendo a la calle y tras su llamada de emergencia los agentes policiales acudieron. Aseguró que aquello se unía a lo que llevaba tiempo sospechando y quiso denunciar. Poco después, el individuo era detenido en el domicilio de los hechos y trasladado a la comisaría de Coslada, donde se negó a declarar y en cuyos calabozos se encontraba anoche a la espera de pasar hoy a disposición judicial. No le constan antecedentes policiales. La pequeña fue explorada por un pediatra en el Hospital del Henares y el SAF de la Brigada Provincial ya está con el caso.