El Supremo ratifica que la huelga salvaje de Metro fue «ilegal»

La empresa reclamará a sus sindicatos 4,7 millones de euros por los «daños y perjuicios» que sufrió por los paros totales de 2010

Ya no cabe recurso. Tras un proceso judicial que se ha alargado durante más de un año, el Tribunal Supremo ha ratificado ahora que la huelga de 24 horas que celebraron los trabajadores de Metro los días 29 y 30 de junio de 2010 –y en la que incumplieron los servicios mínimos– fue ilegal. En el fallo, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, la sala de lo social del Alto tribunal considera se remite al argumento del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) que declaró ilegales los paros por el «acreditado incumplimiento absoluto de los servicios mínimos fijados por la Administración, inobservancia plena que había sido una decisión adoptada en asamblea de trabajadores».

Tres sentencias perdidas

Con esta son ya tres las veces en las que la Justicia tumba las reclamaciones de los representantes de los trabajadores de la empresa de transportes que ahora, tal y como avanzó tras el Consejo de Gobierno de ayer el portavoz regional, Salvador Victoria, podrían enfrentarse al pago de las pérdidas que sufrió Metro como consecuencia de una protesta «salvaje». Metro, explicó el consejero, «iniciará las acciones de responsabilidad patrimonial» y utilizará «los recursos legales» a su alcance para reclamar los daños económicos causados por esa huelga ilegal, no ya sólo a la empresa, sino también «al bolsillo de todos los madrileños».

La compañía calcula que perdió más de 4.747.295 millones de euros en los dos días en que los sindicatos impidieron que se prestara el servicio de transporte, afectando a 3,5 millones de viajeros. «No permitiremos que los ciudadanos paguen las consecuencias de una huelga irresponsable», añadió Victoria, quien acusó a los sindicatos de Metro de utilizar como «rehenes» de sus protestas a los usuarios de la red madrileña.

El líder de CC OO en la empresa, Ignacio Arribas, consideró por su parte «incoherente» la decisión de la dirección de la compañía de demandarles por daños y perjuicios. En declaraciones a Ep recordó que en su última denuncia Metro sólo aludió al carácter «ilegal» de la huelga y prescindió de los elementos indemnizatorios.