Golpe al tráfico mundial de la droga con laboratorio en Madrid

La Guardia Civil, en colaboración con la Drug Enforcement Agency (DEA) estadounidense, ha detenido a un total de 74 personas, de entre 26 y 59 años, y ha incautado 575 kilos de cocaína. También se han desmantelado cinco laboratorios (tres de ellos en Madrid) y se han incautado 11 armas de fuego y 588.000 euros que tenían metálico.

La delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, explicó ayer que también se había incautado 30 kilogramos de sustancias para corte (tetracaína y fenacetina), y que una de las armas de fuego requisadas era un fusil de asalto tipo AK-47. Además se han incautado siete vehículos de alta gama, siete millones de dólares en moneda fraccionada, propiedades inmuebles valoradas en más de 15 millones de dólares y diverso material de laboratorio. Esta macrooperación ha sido bautizada como «operación Gallego» y comenzó hace dos años y medio cuando el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA), de la Guardia Civil de Madrid, supo de la existencia de una organización que podría estar introduciendo, en España, sustancias estupefacientes de Sudamérica y de que estaba siendo investigada, a su vez, por personal destacado en la DEA, por lo que los dos organismos unieron sus fuerzas para conseguir acabar con esta organización.

La Guardia Civil ha informado que entre los detenidos se encuentra Alex P.G. de nacionalidad colombiana y apodado «El turco», este individuo era el encargado de dirigir el tráfico de cocaína entre Sudamérica y Europa desde Brasil, junto con él han sido también detenidos sus dos personas de confianza, su cuñado «Alex el negro», también de origen colombiano, se encargaba de viajar entre España, Uruguay, Colombia y Panamá, donde fue detenido.

El otro pilar de la banda era Sonia R.M. española, casada con un importante cabecilla de la mafia de la toscana , que actualmente se encuentra en prisión. Sonia era fundamental ya que habla italiano y gran parte de la mercancía se dirigía a Italia, donde la cocaína es más cara. Cifuentes ha explicado que en esta acción policial se han desmantelado cinco laboratorios que la banda utilizaba para adulterar la pureza de la cocaína. Estos laboratorios estaban localizados en Benalmádena, Boadilla del Monte, Córdoba y los barrios madrileños de Las Rosas y Entrevías.

La droga llegaba hasta los laboratorios situados en España oculta en el interior de grandes piezas de material industrial. Cuando la cocaína estaba lista para ser vendida, era transportada en dobles fondos ocultos en la carrocería de los coches y era transportada a Italia o Francia. Dos de los principales miembros de la organización resultaron muertos durante la operaciónen Panamá y en Colombia.