Infraestructuras

La Castellana despide al 15% de sus árboles

El Ayuntamiento comenzó ayer en Nuevos Ministerios la tala de 747 ejemplares peligrosos que durará seis meses. En su lugar, Medio Ambiente sólo replantará 439. El paseo ya tiene 232 alcorques vacíos.

Varios operarios trabajan desde ayer de forma coordinada para talar y recoger los troncos para minimizar las molestias
Varios operarios trabajan desde ayer de forma coordinada para talar y recoger los troncos para minimizar las molestiaslarazon

El Ayuntamiento comenzó ayer en Nuevos Ministerios la tala de 747 ejemplares peligrosos que durará seis meses. En su lugar, Medio Ambiente sólo replantará 439. El paseo ya tiene 232 alcorques vacíos.

La arboleda de La Castellana está enferma. El Ayuntamiento ha dado la voz de alarma tras examinar ejemplar a ejemplar durante meses. Graves pudriciones, una elevada presencia de hongos, árboles debilitados, envejecidos y desestructurados, inclinaciones, chancros –ulceraciones– en las ramas y en los troncos y una difícil capacidad de regeneración por las condiciones de su entorno. Éstos son algunos de los defectos encontrados. La gravedad de la situación requiere, según contempla el informe redactado por el área de Medio Ambiente, una actuación de calado que ayer arrancó sobre el principal eje de comunicación urbana de la ciudad.

De los árboles examinados, se actuará en uno de cada cuatro. Un total de 4.844 han sido sometidos al examen de los técnicos: 399 árboles serán podados, 747 se retirarán mientras que 141 unidades deberán ser objeto de seguimiento. Ello implica que, actualmente, el arbolado de riesgo comprende 1.273 unidades. Los trabajos de regeneración está previsto que finalicen en seis semanas y afectarán a cuatro distritos: Tetuán, Salamanca, Chamartín y Chamberí. En las últimas semanas, operarios municipales han ido marcando con puntos amarillos y verdes los árboles que se podarán o talarán. Los primeros en ser retirados ayer fueron los considerados peligrosos en el entorno de Nuevos Ministerios. No todos serán sustituidos por nuevos ejemplares, ya que el plan municipal sólo contempla la plantación de 439 nuevos árboles.

Polución y alta densidad

La renovación será paulatina y, según informó esta semana el área que dirige la concejala de equipo Inés Sabanés, tiene como objetivos garantizar la seguridad de la ciudadanía, conseguir una cubierta vegetal eficaz y crear una arboleda con futuro. Una de las preguntas que se hacen muchos vecinos que han seguido de cerca el deterioro de la arboleda, es cómo se ha podido llegar a esta situación. Las causas que ofrece el Plan de Regeneración para explicar la necesidad de esta actuación son múltiples. Van desde la elevada contaminación y la presión por la gran afluencia de tráfico, a la climatología adversa pasando por los vientos con alta velocidad especialmente en cruces de calles, que pueden conducir a la caída de árboles o ramas. Otro de los motivos radica en la alta densidad arbórea que debilita los ejemplares del interior, que como consecuencia de ello, no tienen un desarrollo adecuado al tener que competir entre ellos por el mismo espacio. También las limitaciones provocadas por la interferencia con edificios, infraestructuras, vehículos, señales, farolas hacen necesarias las actuaciones previstas, especialmente lo que concierne a los ejemplares que serán podados.

Escasa diversidad

El examen de la arboleda revela que aunque hay más de 60 especies distintas a lo largo de La Castellana, la biodiversidad es muy escasa. El reparto por especies así lo demuestra: existe un predominio de Sophora japónica con un 94% en el primer tramo (Plaza Colón-Plaza Doctor Marañón), y del Platano (47%), Melia (14%) y la Sophora (13%) en el segundo tramo (Plaza Doctor Marañón-Hospital La Paz) que representan el 82% de las especies. El resto del arbolado sólo se encuentra de forma muy puntual en cada uno de estos tramos. De cara a la elecciones de las especies para las plantaciones previstas, los técnicos se marcaron el objetivo de mejorar la diversidad, lo que aportará valores estéticos y ornamentales como la estacionalidad, coloración, floración y fructificación. Un total de 21 especies serán plantadas, entre las que destacan las 91 unidades de Pyrus calleryana (peral de flor), las 45 de Celtis australis (almez) o las 40 de Gleditsia triacanthos f. Inermis (acacia sin espinas). En la elección de éstas y del resto de especies que serán plantadas se ha tenido en cuenta cuáles eran las más adecuadas para cada espacio disponible, pensando en el tamaño que pueden alcanzar en su etapa de madurez. Para agilizar y minimizar las molestias que se puedan causar en el transcurso de los trabajos, todo el equipo está coordinado, ya que mientras unos operarios podan y talan, otros recogerán los troncos y ramajes, que trasladarán a la planta municipal de tratamiento de residuos vegetales de Migas Calientes.

Ubicaciones inadecuadas

Al margen de los árboles enfermos y peligrosos, el consistorio también ha hecho una valoración de los centenares de alcorques vacíos que hay en La Castellana, un problema que afecta a toda la ciudad y que los grupos de la oposición han denunciado en numerosas ocasiones. Sólo en el tramo examinado para la elaboración de este plan, se han detectado 232 alcorques vacíos con el objetivo de estudiar la viabilidad de su reposición. El documento municipal señala a este respecto que para los que presentan ubicaciones inadecuadas (en paradas de autobús, en pasos de peatones, próximos a arquetas o servicios, etc.) se propone su clausura; para los alcorques inapropiados, aquellos con escasas dimensiones, deteriorados o mal posicionados, se han buscado soluciones como ampliar su tamaño, reconstruir o retranquear.

También se han examinado aquellas alineaciones de árboles próximas a bordillos de la calzada y al carril bus, así como otras que presentan interferencias con farolas y semáforos o en infraestructuras viarias. Estos problemas desaparecerán en las nuevas plantaciones ya que las nuevas ubicaciones propuestas evitan los emplazamientos próximos a la calzada o al carril bus. Los trabajos contemplan también la ampliación de los marcos de plantación y la sustitución de pavimento por terrenos en zonas no aptas para el paseo.