Samur

Noche de paz

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La última fiesta de 2013 y la primera de 2014 fue muy tranquila para los madrileños. En comparación con años anteriores, los servicios de Emergencias de la Comunidad y del Ayuntamiento de Madrid realizaron muchas menos intervenciones para paliar los excesos de la Nochevieja. Especialmente se notó el descenso en los accidentes de tráfico, que se redujeron en un 62% respecto al año pasado. Quizás fuese el frío que se intensificó durante las uvas o que este año las campanadas sonaban en martes o quizás que los ánimos estaban más calmados para celebrar la fiesta con tranquilidad. De cualquier forma, tanto el Summa como el Samur han atendido muchas menos emergencias que en Nochevieja de 2013.

En concreto, Summa atendió un 8,4 por ciento menos de llamadas que el año pasado –de 3.402 a 3.114– y no hubo sucesos de gravedad que requiriesen la intervención de los servicios médicos de emergencia o los Bomberos de la Comunidad de Madrid. Así, las intoxicaciones etílicas descendieron un 5 por ciento respecto al año anterior, al pasar de 159 atenciones en 2013 a 151 en 2014. Igualmente, también se redujeron las agresiones y reyertas, probablemente también vinculadas al exceso en el consumo de alcohol. Entre la medianoche y las nueve de la mañana, se intervino en 203 peleas, cuando en 2013 las actuaciones por este motivo fueron 222.

Pero lo más llamativo fue el descenso en los accidente de tráfico que, en una noche en la que hay muchos desplazamientos y consumo de alcohol por lo que históricamente es un momento de múltiples colisiones. Según los datos del servicio de Emergencias 112 de la Comunidad de Madrid, tan sólo se produjeron 40 accidentes, frente a los 106 del año pasado, lo que supone una reducción del 62 por ciento. Desde el 112 señalaron que probablemente las condiciones de la noche en las carreteras madrileñas, sin niebla ni lluvia como la del año anterior han contribuido al descenso en los siniestros. En la misma línea, descendieron un 46% las infracciones de tráfico, que pasaron de 41 en 2013 a 19 este año. El único dato que sube fue el de las actuaciones por incendios, que crecieron un 19%.

Menos borracheras

Por su parte, en la capital se mantuvo aproximadamente el mismo número de actuaciones por parte de Samur-Protección Civil que el año pasado, atendiendo 189 emergencias frente a las 186 de 2013. De ellas, la mayor parte correspondieron a heridos leves en peleas (42 intervenciones), seguidos por las intoxicaciones etílicas (30 actuaciones) que, sin embargo, han descendido notablemente respeto al año anterior, cuando se atendieron 51 borracheras graves.

También hubo 5 salidas por accidentes de tráfico y una actuación grave por dos sobredosis de heroína en Lavapiés. Los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid realizaron 51 salidas en las que extinguieron 25 incendios en contenedores y uno en un coche quemado, lo que supone un número similar al año pasado. Por su parte, la Policía Municipal realizó 838 actuaciones en el dispositivo especial desplegado para la Nochevieja.

El doble de basura

Frente a la reducción general de las cifras de las emergencias atendidas, sorprende el gran aumento de la basura recogida en el centro de Madrid tras la fiesta de las campanadas de fin de año. Desde las 1:30 horas hasta las 4:00, el dispositivo desplegado por los servicios de limpieza del Ayuntamiento de Madrid recogió 22.500 kilos de basura en la Puerta del Sol, lo que supone casi el doble de lo que se limpió el año anterior, 13.000 kilos también en 2011, cuando se recogieron 17.200 kilos de desperdicios.

El dispositivo especial de limpieza para la madrugada de Año Nuevo, formado por 102 personas y 29 vehículos del Servicio de Limpieza Urgente (Selur) y de Limpieza Viaria del distrito Centro, se afanó por devolver rápidamente el centro de Madrid a la normalidad. El área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid ha diseñado diferentes dispositivos de limpieza y recogida de residuos durante toda la Campaña de Navidad, que incluye el refuerzo del servicio de recogida y transporte de basura y que ha funcionado con la habitual eficacia.