Hallan sin vida al segundo hombre desaparecido tras el derrumbe de la obra en el centro de Madrid

El cuerpo sin vida de Agustín Bello, de 42 años y vecino de Parla, segundo desaparecido en el derrumbe de un edificio en el paseo del General Martínez Campos de Madrid, tenía siete metros de escombros por encima.

Los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid han localizado este viernes sin vida al segundo de los dos hombres que se encontraban desaparecidos desde el martes tras el derrumbe de unas obras que se estaban realizando en el edificio ubicado en el número 19 de la calle General Martínez Campos, en la capital, ha confirmado a Europa Press un portavoz de Emergencias Madrid.

El cuerpo de Agustín Bello Moreno, obrero de 42 años, ha sido encontrado a primera hora de la mañana por los Bomberos debajo de siete metros los escombros. Cuando se produjo el derrumbe, estaba en la segunda planta y cerca de la zona de montacargas, por lo que, al llegar el Samur sólo ha podido confirmar el fallecimiento de la víctima.

Los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid localizaron ayer sin vida a uno de los dos hombres desaparecidos desde el martes tras el derrumbe de unas obras que se estaban realizando en el número 19 del paseo General Martínez Campos, confirmó el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero.

Según detalló la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, el hombre hallado pasadas las cinco de la tarde es José María Sánchez, de 56 años, natural de Malpartida de Plasencia (Cáceres), que estaba trabajando en la obra realizando labores de retirada de carpintería de madera. El fallecido pertenecía a la empresa Tygma, una subcontrata de los trabajos que se estaban realizando en el edificio, que se estaba reformando.

Según explicó el jefe de los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, Eugenio Amores, el cuerpo sin vida de José María Sánchez fue encontrado gracias al cambio de estrategia que pusieron en marcha ayer por la tarde consistente en retirar los elementos inestables que podían precipitarse sobre la zona de trabajo para poder avanzar más rápido en las labores de desescombro. Así, los profesionales han podido trabajar más activamente y a campo abierto.

Los bomberos que hallaron el cuerpo lo han identificado pronto, ya que conocían las características físicas de las dos personas que buscaban y porque llevaba la documentación encima. Amores detalló que el cadáver se encontró a dos metros de la profundidad de la cuota máxima de escombros, es decir, a cinco metros de la cuota cero de la montaña de escombros, encima de cascotes «muy compactados». El cuerpo estaba politramutizado, por lo que «no ha sufrido en absoluto». «Estamos convencidos de que la muerte ha sido en el acto», añadió.