Operación Lezo

Seguriber sostiene que quien vigilaba las cámaras no avisó porque no vio nada

Iván Somonte, de Seguriber, asegura que su función era meramente pasiva

El inspector jefe de Seguriber, Iván Somonte
El inspector jefe de Seguriber, Iván Somontelarazon

El inspector jefe de Seguriber en el Madrid Arena durante la fiesta de Halloween, Iván Somonte, declaró ayer ante el juez Eduardo López-Palop, instructor del caso, que el vigilante de seguridad responsable de la sala de control de cámaras «no vio nada» llamativo en las pantallas de videovigilancia durante la trágica fiesta. No vio avalanchas, ni exceso de aforo. ni petardos que le hicieran avisar de alguna incidencia. Es más, afirmó que su función era «meramente pasiva», tan sólo debía controlar si las cámaras funcionaban para visionar lo grabado con posterioridad.

Somonte acudió al Madrid Arena después de que se produjera la avalancha cuando uno de los responsables de Seguriber, Raúl Monteverde, le avisó de lo que había sucedido. El inspector jefe, que no había ido antes por estar de viaje, fue el encargado de avisar al operario de la sala de videovigilancia para que guardara todas las imágenes grabadas de esa noche.

Según explicaron varios letrados de las acusaciones particulares a su salida del juzgado, Somonte detalló que la sala de control de las cámaras cuenta con dos monitores que se subdividen en 16 pantallas respectivamente y que corresponden a las imágenes que recogen las 32 videocámaras de vigilancia instaladas en el Madrid Arena. El inspector jefe de Seguriber precisó que, en 2010, Madrid Espacios y Congresos (Madridec) –empresa municipal que gestiona el edificio– ordenó que se retiraran seis de esas cámaras, entre ellas la que apunta al vomitorio en el que se produjo la avalancha mortal. De hecho, el pasado domingo, la Policía Nacional y técnicos de Madridec acudieron al recinto para comprobar cuándo se desactivó esa videocámara y qué fue lo último que grabó.

Por otro lado, Somonte ha señalado al coordinador de Proyectos de Madridec, Francisco del Amo, como la persona que dio la orden de abrir al público el portón de emergencias de la cota cero para que accediera directamente a la pista –lo que provocó una saturación de gente que, en última instancia, desembocó en la avalancha mortal en una de las pocas salidas habilitadas–. Según el inspector jefe de Seguriber, Del Amo se lo dijo al jefe de equipo de Seguriber, José Antonio Díaz Romero, que trasladó la orden al vigilante que controlaba dicha entrada.

Este punto es uno de los más polémicos del «caso Madrid Arena», tanto por lo importante del hecho como porque los distintos imputados han ido echándose las culpas mutuamente. Por este motivo, López-Palop valora hacer un careo entre algunos de ellos.