Suspensos masivos en las oposiciones a profesor: muchas plazas quedarán vacante

En algunas especialidades no ha habido ningún aprobado. Los aspirantes cuestionan los criterios de evaluación y Educación insta a reclamar a los que discrepen de su nota.

En la especialidad de Artes Plásticas y Diseño en Joyería Artística había diez aspirantes y se convocaban dos plazas. Han quedado desiertas. La nota más alta ha sido un 4,2. «No hemos pasado ninguno a la segunda fase y eso que el cincuenta por ciento de los aspirantes éramos docentes dedicados a esta especialidad, algunos con de 15 años de experiencia a nuestras espaldas. Hemos reclamado y no nos han movido ni una décima», explica una opositora que prefiere permanecer en el anonimato.

En el caso de Orfebrería, tampoco ha promocionado nadie a la segunda fase. Se convocaban tres plazas y han quedado desiertas. «Lo primero que piensas es qué zoquetes somos, menuda ineptitud la de los aspirantes, pero luego piensas otras hipótesis porque no es normal el elevado número de suspensos. En un primer momento, nos echamos nosotros la culpa pero puede haber otras razones ocultas», añade.

Los opositores comentan que les han llegado rumores de que los tribunales han explicado que los aspirantes no saben escribir, que el nivel era bajísimo, que había un montón de faltas de ortografía...

Ayer había al menos un centenar de opositores que protestaban a las puertas de la Asamblea de Madrid por el elevado número de suspensos y de plazas que no se cubren para el ingreso como profesor de Enseñanza Secundaria, Profesores de Escuelas Oficiales de Idiomas, profesores Técnicos de Formación Profesional, de Música y Artes Escénicas y de Artes Plásticas y Diseño. Precisamente se trata de una convocatoria de plazas histórica por el elevado número: 2.200 en total.

Los opositores exigían una explicación sobre los criterios de puntuación por los suspensos masivos e «injustificados», según manifestaban ayer. Y es que, algunos afectados ayer lamentaban que «los criterios de evaluación para la parte práctica se conocieron 48 horas antes del examen porque algunos considero que son más bien subjetivos», decía otra aspirante decepcionada.

Marcela Linari lleva veinte años como profesora interina de la Comunidad de Madrid. «Después de ocho años sin convocarse oposiciones se vuelve a repetir lo que ha pasado en todas las oposiciones de música desde el año 2000: se convierte una oposición en un concurso de piano o de violín o del instrumento que sea sin tener en cuenta la calidad ni la experiencia del docente. Esto es una ilegalidad. Según Bruselas, con más de tres años nos deberían hacer directamente profesores fijos. No queremos pasar por más oposiciones porque el sistema es corrupto. La Comunidad de Madrid delega en los tribunales, que son soberanos, para hacer lo que quieran y los tribunales se escudan en que el sistema es justo y que ellos tienen que evaluar. Ni siquiera nos permiten pasar a una prueba en la que nos dejen demostrar nuestra experiencia docente», explica indignada.

En la especialidad de Piano, en la primera prueba, de 56 aspirantes han aprobado 11. A eso se añade otra preocupación para Marcela: «Los músicos somos como los deportistas de élite, interpretamos con nuestro cuerpo y al envejecer, nunca vamos a estar al mismo nivel que la persona que acaba de terminar una carrera con 24 años. Los años juegan en nuestra contra».

El consejero de la Educación e Investigación, Rafael Van Grieken, negó que haya habido falta de transparencia en un proceso que «se ha desarrollado con total normalidad». Entre otras cosas porque «los criterios de evaluación y las normas de puntuación estaban publicados y los exámenes eran autocopiativos de tal forma que cada opositor ha salido de su examen con una copia», explicó el consejero.

Van Grieken se mostró confiado en la labor que hacen los tribunales de oposiciones que durante estos días han estado examinando a cientos de personas y en los que se delega la corrección de las pruebas. En su opinión, están conformados por «un tribunal de expertos funcionarios de carrera que para mí tienen toda la credibilidad y que regulan la calidad de la educación pública madrileña», dijo.

Van Grieken especificó que los criterios de evaluación no son más exigentes precisamente este año que en otras convocatorias anteriores. Entre otras cosas porque son los mismos que se aplicaron en la última convocatoria de oposiciones. Por eso instó a los aspirantes a profesores a que, teniendo una copia del examen que realizaron, hagan un trabajo de corrección paralelo al de los examinadores y comprueben sus aciertos. Así, animó a reclamar y presentar un recurso de alzada a todo aquel que no está conforme con la calificación obtenida en la convocatoria. «Se atenderá su reclamación y, si tienen razón, se subirá la nota y no se quedará como está porque tienen todos los elementos como para que si consideran que con ellos se ha cometido una injusticia respecto a la valoración de ese examen se pueda hacer una reclamación fundada». Van Grieken, no obstante, avisó de que «habrá más oportunidades».

Lorena, opositora

«Salí contenta del examen pero mi nota fue 0,00»

Lorena es opositora a Geografía e Historia y este año era la primera vez que se presentaba. «Salí contenta del examen y la nota que he obtenido es un 0,00 en la parte que más vale, en el examen práctico, que cuenta un 70 por ciento. Lo asombroso es que en mi tribunal estamos 19 personas más con la misma nota, en el tribunal de al lado hay 33 personas que tienen entre un cero y un uno y la mayoría de los suspensos son entre cero y uno». Lo más difícil de entender para Lorena es que «llevamos preparándonos años, hemos estudiado una carrera de cuatro para obtener esa nota cuando eran textos o preguntas totalmente asequibles y salimos contentos con las prácticas que hicimos. Lo que pedimos es que nos enseñen las plantillas de corrección del tribunal, queremos transparencia».

Lorena quiere que le expliquen los criterios que se han seguido a la hora de corregir los exámenes. Sin embargo, «cuando vas a preguntar a un tribunal dicen que tiene prohibido decirte el motivo de tu nota, así que sigo sin saber por qué he tenido un cero».